El economista Néstor Perticarari explica qué supone la estanflación anticipada por Javier Milei. “No hay que llamarse a engaño al creer que si se pone otra moneda no hay Banco Central”, remarcó el especialista.
La combinación de la recesión y la inflación da como resultado la estanflación, un término que durante la semana que finalizó se instaló en la agenda pública a raíz de las declaraciones Javier Milei. Quien el 10 de diciembre asumirá la Presidencia de la Nación anticipó que la crisis económica continuará –al menos– durante la primera etapa de su gobierno, justamente, con un estancamiento de la actividad productiva y la persistencia de la suba de precios. “Para justificar políticas, se van agitando las aguas”, resumió Néstor Perticarari, licenciado en Economía, al procurar una explicación de lo dicho por el próximo jefe del Ejecutivo nacional.
En otras palabras, “caída de la actividad, aumento del desempleo” se encuadran con “el ajuste que pregona” (Milei), explicó el especialista en contacto con ABC1 (que se emite este domingo, a las 23, por Somos Santa Fe y Somos Rafaela; y a las 21, por Somos Rosario). En frente de ese panorama, se ubica la hiperinflación. Ahora bien, “no es cuestión de decir ‘va a haber estanflación’, sino ‘cómo salgo de ahí’ –observó el docente e investigador de la UNL–. El presidente no es un comentarista de la realidad”.
Entre lo que el próximo jefe de Estado sostuvo durante su campaña electoral y lo que efectivamente llevará a cabo, Perticarari analizó: “El Fondo Monetario Internacional (FMI) siempre propugnó el ajuste fiscal. Posiblemente, el FMI no haya estado de acuerdo con la dolarización y el cierre del Banco Central. Pero Milei abandonó la idea de bajar la inflación de golpe con la dolarización. El ajuste fiscal sigue en pie”.
Sobre el vínculo con el organismo de crédito internacional que podrá tener la gestión de Milei, el economista consultado por ABC1 fue claro: “Cualquier acreedor quiere cobrar y para eso se requiere superávit primario: más ingresos que gastos”. Por ese motivo, el FMI no titubea al apoyar las medidas que el líder libertario pretende aplicar. Al respecto, Perticarari consideró que no tiene mayor sentido el cierre del Banco Central porque “todas la monedas que circulan provienen de algún banco central”. “No hay que llamarse a engaño al creer que si se pone otra moneda no hay Banco Central”, opinó.
Por último, el economista reparó que el verdadero rol que debería asumir la Secretaría de Comercio es evitar acciones monopólicas u oligopólicas. Y no el control de precios, más aun si la inflación no se ha logrado detener. “Lo que se deben tener son políticas macroeconómicas consistentes”, adujo.
