El ministro de Economía de Santa Fe analizó la coyuntura económica a nivel nacional, demandó hablar de producción y atender la pobreza. También explicó de qué manera la provincia logró obtener créditos internacionales, en tanto ponderó las acciones en torno a la obra pública y se refirió a la deuda de Nación.

Con los resultados de las elecciones PASO y ya en vistas al 16 de junio, cuando los santafesinos y santafesinas deban elegir a sus gobernantes y representantes, la actual gestión provincial no deja de observar la marcha de la economía en un contexto nacional complejo. En efecto, el responsable del área ministerial, Gonzalo Saglione se mostró preocupado ante la situación presente y también en cuanto a las proyecciones.

“Uno no observa ninguna reacción por parte del equipo económico que permita vislumbrar dónde está el punto de inflexión de la situación económica que venimos viviendo en los últimos meses, cada vez con mayor gravedad”, expresó el funcionario en diálogo con Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario). En ese sentido, objetó que la “agenda económica” continúe “dominada por lo financiero; y es parte de una concepción”.

La grieta económica

Saglione, a propósito, reclamó hablar de “producción”. “No se va a resolver el principal problema económico social, que es la pobreza, con medidas de tinte financiero. Argentina tiene que producir más. Y si tenemos una política económica que no tiene el centro de sus decisiones cómo producimos más, no veo la salida”, planteó el ministro. Con una mirada aguda, expuso también que “es necesario, con la mayor brevedad, entendamos desde la dirigencia política argentina que debemos construir consensos, mayorías y tratar de evitar la confrontación permanente”, en tanto consideró que “la grieta política le ha hecho mucho daño a la sociedad argentina”.

En paralelo a esas diferencias tajantes en términos políticos, Saglione analizó la “grieta económica”. A partir de lo dispuesto en el período kirchnerista, “parecía que Argentina podía crecer de la mano de un estímulo al consumo y del gasto público: dos componentes de la demanda agregada. Eso tiene patas cortas porque si no hay exportaciones e inversiones, nos vamos a quedar sin dólares, sin divisas, porque parte de lo que consumimos lo compramos en el exterior. Y si no exportamos nos quedamos sin dólares y si no invertimos, va a haber inflación. Es intrínseco al modelo el proceso inflacionario”, explicó.

Como contrapartida, las acciones llevadas a cabo desde la administración Cambiemos se plantó en “crecer de la mano de las exportaciones y las inversiones, se olvidó el consumo y el rol que tiene el Estado en la economía”. “No es ni por el consumo y el gasto público, ni por la inversión y las exportaciones, es por es un crecimiento armónico de todos los componentes de la demanda agregada que permite sostener un crecimiento a lo largo del tiempo”, fundamentó el ministro de Economía de Santa Fe.

Lavagna

Consultado sobre el perfil de Roberto Lavagna, quien se posiciona como a una tercera alternativa tanto en el plano electoral como en la puesta en marcha de un plan económico, Saglione opinó que “tiene varios elementos que lo posicionan muy bien, de cara a esta coyuntura”. Uno de ellos es haber ya conducido la política económica en momentos difíciles y “haber sacado a la economía argentina de esa situación de crisis”. Al mismo tiempo, “tiene un discurso que permite generar consensos antes que potenciar los disensos”, valoró el funcionario de la gestión del FPCyS. Y definió: “Es conveniente ir a un gobierno que trate de construir mayorías y las características de Lavagna ayudan en ese sentido, con un discurso que no alienta la confrontación”.

Obras

Con relación a la actividad productiva provincial enlazada al desarrollo de la obra pública, el funcionario consignó que el gobierno sigue de cerca un indicador que mide el empleo registrado en el sector de la producción. “Hace varios meses que viene mostrando una caída interanual en el país. En Santa Fe crece y esto se explica, básicamente, por la obra pública. Y, específicamente, por la obra pública provincial”, precisó.

En esa misma línea, Saglione marcó distinciones con la gestión municipal y aludió al Acuerdo Capital, suscripto cuando José Corral iba por la reelección en la Intendencia, bajo el sello del FPCyS, y Miguel Lifschitz era postulante a gobernador, en 2015. “Días atrás, hicimos una presentación pública, encabezada por el gobernador, rindiendo cuentas de lo que nos habíamos comprometido en el marco del Acuerdo Capital y lo que, efectivamente, hemos ejecutado. Dijimos que íbamos a hacer 100 obras e hicimos 150”, recalcó.

Créditos

Otro de los ejes que abordó el titular de la cartera económica de Santa Fe fue las estrategias llevadas adelante para lograr créditos a nivel internacional. “El riesgo país significa que, cuando Argentina sale a buscar financiamiento en el mundo, se le cobra un 8% de tasa por sobre la tasa libre de riesgo de Estados Unidos que está en el 2,5. Con lo cual, si hoy Argentina sale a buscar financiamiento internacional paga el 10, 10,5, 11 como mínimo”, explicó y aclaró que los préstamos contraídos por Santa Fe son con tasas de entre 4,5 y el 5% anual. Al subrayar esa diferencia, ponderó que en la provincia “hay división de poderes”, además de “haber honrado siempre sus deudas” y “también tiene que ver con una política de Estado, con continuidad de las políticas en el tiempo. Tenemos una política de Estado en materia de financiamiento. Eso que adolece Argentina, Santa Fe lo tiene”, enfatizó e indicó que esos fondos obtenidos “siempre fueron destinados a importantes obras de infraestructura”.

La deuda

Finalmente, el ministro de Economía se pronunció sobre la deuda que la Nación mantiene con la provincia en concepto de coparticipación y que ha merecido, incluso, la intervención de la Corte Suprema de la Nación. “En el caso de Santa Fe, a diferencia de San Luis, decidimos dar una señal hacia la sociedad de que el diálogo político debía estar por encima de la judicialización de la política. Con el fallo emitido el 24 de noviembre de 2015, en sus primeros días de gestión Miguel Lifschitz se comunicó con las autoridades nacionales y nos pusimos a disposición para ver cómo actualizábamos la deuda y cómo se iba a ir pagando en el tiempo”, desarrolló Saglione.

Pasado el tiempo y ya en 2017 vino el mentado Consenso Fiscal, en el que “logramos incorporar una cláusula, firmada por el presidente de la Nación, que dice que antes del 31 de marzo de 2018 vamos a ponernos de acuerdo”, repasó. Y agregó: “No solo que no cumplió sino que pasó más de un año. No se cumplió con lo firmado por el presidente de la Nación –insistió– y fuimos a la Corte, seguramente, unos meses después que lo hizo San Luis. Por eso, nuestro fallo todavía no salió. Pero no es un fallo que no resuelve el fondo, que ya está resuelto –postuló–, sino que resuelve con qué tasa de interés hay que traer esa deuda que se generó durante 10 años a valores del momento en que se piense a pagar”, concluyó.

Artículo anteriorCapitani y Chialvo rescataron las políticas anticíclicas del PJ
Artículo siguienteConvocan a concurrencias ad-honorem para el Alassia