Gracias a escuchas telefónicas, en el marco de la investigación por el asesinado de Marcelo Ocampo, se logró detectar que Lucas F. había ordenado el crimen.

Un mes atrás, Marcelo Nicolás “Fino” Ocampo –condenado en juicio abreviado en la causa de asociación ilícita de Esteban Lindor Alvarado– fue asesinado a tiros en el suroeste de Rosario. A partir de entonces, el fiscal Matías Edery ordenó una serie de intervenciones telefónicas en el marco de la investigación por ese homicidio.

De esa forma se supo que, desde la cárcel, una persona se comunicaba con el sicario, que aparentemente terminó con la vida de Ocampo, para asignarle otra tarea: matar a un socio gerente de la empresa Nutrilab. La orden estaba dada por un socio de la víctima y el pago sería de 500 mil pesos. Cabe remarcar que el sicario se encuentra detenido en el marco de la investigación del mencionado Ocampo.

El crimen se debía llevar a cabo el lunes pasado, a las 10. Previamente llegaron agentes de la Agencia de Investigación Criminal para anunciarle lo que podría suceder a raíz de las escuchas detectadas. Este hombre fue resguardado. Quien dio la orden, Lucas F., fue detenido por tentativa de homicidio agravado por el pago de una remuneración.

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