Senadores radicales de Santa Fe también buscan contemplar la eventual interrupción de la cadena de pagos como efecto directo del aislamiento obligatorio.

El bloque de senadores de la UCR de la provincia de Santa Fe, ante los efectos económicos directos e indirectos de la pandemia COVID-19 –derivados del aislamiento obligatorio–, manifestaron la necesidad de abarcar en una mayor dimensión la problemática del  sector de los “pequeños cuentapropistas o autoempleados” y tratar de que se procuren “medidas entre el gobierno nacional y el provincial para mitigar los efectos negativos en la interrupción de la cadena de pagos una vez que se retomen las distintas actividades económicas”.

La posición del bloque es suscripta por su presidente Felipe Michlig (San Cristóbal) y Rodrigo Borla (San Justo), Orfilio Marcón (General Obligado), Germán Giacomino (Constitución) y Lisandro Enrico (General López), quienes aguardan “una reunión con el gobernador Omar Perotti para acercar y analizar distintas alternativas propositivas”.

La intención de contribuir con iniciativas  y sugerencias –en cuanto a medidas gubernamentales deseables– (desde el inicio de la pandemia en el país), también se han formulado desde el bloque de la UCR proyectos que apuntan a la “Creación de un Fondo Extraordinario para la emergencia sanitaria de la Provincia de Santa Fe” y un Programa para “PyMES Santafesinas ante el COVID-19” destinado a atender y contener a las empresas Pymes radicadas en la Provincia de Santa Fe que soportan los efectos económicos derivados de la pandemia COVID-19.

Pequeños cuentapropistas o autoempleados

Los legisladores señalan que al presente y visto la evolución de la pandemia de COVID-19, que “los efectos directos e indirectos serán enormemente significativos en la actividad económica, en el marco de las medidas esenciales adoptadas por razones sanitarias (DNU N° 297/20 estableciendo un aislamiento social, preventivo y obligatorio. Por su parte, en la órbita provincial el respectivo Decreto N° 270/20)”.

“En tal sentido, desde el gobierno nacional se han dispuesto medidas tendientes a mitigar tales efectos en distintos grupos poblacionales tales como personas que trabajan en relación de empleo público, personas que trabajan en relación de dependencia bajo empleo privado, beneficiarios del sistema previsional y beneficiarios de distintos programas sociales”.

“No obstante, se observa que hay un sector de la población que conforma un grupo tan amplio y diverso, como también vulnerable. Se compone de lo que coloquialmente se conoce como “pequeños cuentapropistas o autoempleados” cuya característica en común es que su único o casi exclusivo medio de sustento económico se compone de ingresos que se procuran en forma diaria a cambio de prestaciones personales sin relación de dependencia”.

Diversas situaciones

La diversidad de situaciones que integran dicho grupo hace que su identificación no pueda realizarse en base a una sola categoría jurídica o tributaria u ocupacional, sino que deba recurrirse a la combinación de marcos categoriales. Ejemplos de este grupo poblacional aún no contemplado serían: quienes realizan trabajos de desmalezado, pequeños talleres mecánicos, talleres de costura, ayudantes de albañilería, reparaciones a domicilio (plomería, gasista, electricista), etc.

En función de ello puede el grupo referido delimitarse con las siguientes situaciones:

Monotributistas (Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes) encuadrados en las categorías de ingresos más bajas de la escala.

Monotributistas sociales

Personas con vínculos ocupacionales precarios, inestables e informales que integran lo que estadísticamente se denomina “Sector Informal Urbano”.

“Hay que reconocer la existencia de programas permanente en la órbita nacional y provincial que aportan a garantizar la atención de necesidades básicas como la alimentación así como también con ingresos monetarios que apuntan a garantizar derechos. Entre otros, cabe destacar la tarjeta Alimentar, la Asignación Universal por Hijo, subsidios de desempleo, programa ASU, ayudas económicas, etc. Asimismo, también hay otras medidas puntuales que muy posiblemente se agregaran”, resaltaron.

Una parte del grupo poblacional antes citado estará dentro de la cobertura de tales programas y medidas. Sin embargo, una parte no menor de dicho grupo no estaría comprendido en tal cobertura o dicha cobertura no resulta suficiente para atender todas las necesidades familiares.

Por eso se torna indispensable acometer con medidas que apunten a la cobertura de este grupo poblacional con soluciones aceptables y sostenibles.

Cadena de pagos

Los senadores radicales indican que “el efecto de la pandemia y luego el aislamiento obligatorio han tenido y tendrán un efecto muy fuerte e imprevisto en la cadena de pagos. Pequeños empresarios habían emitido cheques de pago diferido a sus proveedores y otros servicios considerando un contexto de regularidad de los circuitos financieros, los cuales luego se han visto afectados rápida y sensiblemente por caída de ventas y cobros”.

“Por lo tanto es probable que cuando lleguen los vencimientos de esos cheques, una cantidad importante de pequeños empresarios no cuenten con los fondos para atenderlos o autorizaciones bancarias que permitan cubrirlos. Y la vertiginosidad de los acontecimientos más las restricciones de la atención bancaria tampoco han permitido que se puedan ir viendo alternativas”.

«Todo esto puede hacer impacto el primer día de apertura de atención bancaria, cuando ingresen los cheques al cobro. Adicionalmente, el final del plazo de aislamiento coincidirá con las fechas de pago de salarios y la afectación de la cadena de pagos antes comentada también implicará dificultades a las empresas para poder cumplir».

«Por eso amerita que se analicen en forma urgente estas situaciones y su abordaje conjunto entre el gobierno nacional y los gobiernos provinciales”.

FuentePrensa F. Michlig
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