Así lo definió Iván Trossero, de Almacén de Cervezas, en virtud de las diversas propuestas que supieron ampliar el mercado en la ciudad y la región. “Quien se abre a probar nuevos estilos encuentra un mundo que difícilmente deje”, aseguró.

“Hace dos años decidimos abrir un comercio vinculado a la cerveza artesanal. Al principio, la idea era elaborar cerveza y trajimos cerveza de productores regionales, de Rosario, Buenos Aires y Córdoba”. De esa manera, Iván Trossero, titular de Almacén de Cervezas, comentó los orígenes del comercio en su paso por ABC1 (que se emite este domingo a las 23, por Somos Santa Fe y Somos Rafaela, y a las 21 por Somos Rosario).

Otra de las propuestas del emprendimiento fue ofrecer también cervezas importadas, dentro del local ubicado en barrio Candioti de nuestra ciudad (Sarmiento 3704). “Lo que brinda la cerveza artesanal es una experiencia. Hay un abanico tan grande de cervezas artesanales, que hay lugar para todos. La propuesta fue buscar cervezas para todos los gustos, sin gluten, sin alcohol. También con la idea de poder tomar pintas al paso”, continuó el empresario.

En ese sentido, Trossero también hizo hincapié en que “en el mercado de la cerveza artesanal se puede encontrar una cerveza lo más suave posible, otras más ácidas o con agregados de whisky o de coñac, de barrica”. Y enfatizó: “Santa Fe sigue siendo un polo a nivel país”.

Con relación a las marcas tradicionales, el empresario prefirió descartar el término competencia para apuntar a la “complementariedad”. “Creemos en sumar esfuerzos, sumar nos generó muchos más beneficios que competir”, postuló.

Sobre el crecimiento del mercado, consideró que nuestra ciudad hay un gran arraigo al tradicional liso, “pero la persona que se abre a probar nuevos estilos de cerveza encuentra un mundo que no conocía y que, difícilmente, deje después”. De esa forma, también resaltó el apoyo a las economías regionales.

A pocos días de abrir una nueva sucursal, Trossero apuntó a la idea de fomentar las cervezas artesanales producidas en la propia ciudad. “Es fundamental para comprender de qué se trata, explicar a los clientes. Nuestro objetivo es que el cliente o amigo consuma lo que le gusta, no lo que le quieren vender, incluso le damos de probar diferentes gustos”, planteó.

Al momento de brindar un consejo para seleccionar la primera cerveza artesanal, el empresario esgrimió que “las industriales tienden a ser suaves, rubias por lo general”. Dentro de las artesanales, para ese paladar se encuentran también rubias suaves que tienen la misma fermentación que se utiliza en las cervecerías industriales.

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