En el marco del escándalo de los cuadernos de las coimas, empresarios confesaron haber pagado sobornos y adujeron haber sido “extorsionados” por parte de la gestión kirchnerista. Entre ellos, Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri.

En medio del escándalo desatado por los cuadernos que revelan sendas operaciones de corrupción que involucran al gobierno kirchnerista, Ángelo Calcaterra, el primo de Mauricio Macri, reconoció haber pagado coimas durante aquella gestión. En ese contexto, varios empresarios se acogieron a la figura del imputado arrepentido o “imputado colaborador”.

Esto último implica que si la justicia comprueba que lo dicho por esos empresarios es verdadero, pueden lograr una disminución de su pena. En concreto, se reconoció el pago de sobornos para la concreción de obra pública, pero además se indicó que también habían contribuido a campañas electorales de 2013 y 2015 de la gestión kirchnerista, mediante una extorsión.

Según publicó en su cuenta de Twitter Hugo Alconada Mon, periodista del diario La Nación, estos empresarios –mediante la estrategia del arrepentimiento o “la victimización”– pretenden evitar la cárcel, callar la cartelización de la obra pública, callar los sobreprecios y bloquear las evidencias del Lava Jato “que vendrá de Brasil”.

No debe soslayarse que estas operaciones pueden correrse las investigaciones en torno a la causa Odebrecht. Al mismo tiempo, Calcaterra no había sido detenido ni había sido imputado no obstante lo cual se presentó de manera espontánea ante el Juzgado de Claudio Bonadio este lunes. Allí, el empresario declaró que Javier Sánchez Caballero había recibido órdenes suyas. En ese orden, se aleja también la figura del delito de asociación ilícita.

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