Leila Micaela Ríos, quien había estafado a un joven que conoció por la popular aplicación de citas, fue detenida luego de tres años. Los investigadores descubrieron además que la mujer cumplía una pena en prisión domiciliaria.

Atraparon en la provincia de Santa Fe a “La estafadora de Tinder”, una mujer que había engañado durante años a un joven boliviano que vive en Puerto Madryn (Chubut). A través de la aplicación de citas, se presume, logró quedarse con más de cuatro millones de pesos, lo que generó la denuncia ante la justicia que dio inicio a la búsqueda.

La autora de la estafa virtual fue identificada como Leila Micaela Ríos, de 27 años, quien se desempeñaba como suboficial de la Policía de Santa Fe. La investigación dio con el paradero de la joven, luego de la denuncia iniciada el 9 de marzo pasado por la víctima, de 24 años, quien reside en el sur del país y con el que mantuvo por tres años una relación “virtual” a través de las redes sociales.

De este modo, “la estafadora argentina de Tinder” cayó en manos de la justicia tras ser detenida en la provincia de donde es oriunda, tras estafar a un a un joven al que le sacó 4.500.000 de pesos. En el allanamiento al domicilio de Ríos, las autoridades confirmaron que la mujer fue la autora del fraude, que data desde el 2019. Asimismo, según medios locales, registraba una causa en su contra por la que le incautaron 200 kilos de marihuana.

“Hace alrededor de tres años conocí a través de una página de citas a esta chica, su nombre era Leila”, dijo y detalló: “Comenzamos a comunicarnos por WhatsApp. Ella me comentó cosas de su vida. Me dijo que había sido abandonada por dos maridos y que tenía tres hijos que mantener. Yo en principio accedí a ayudarla enviando dinero por distintos montos, con el tiempo esto era más frecuente porque sentía que el vínculo era más cercano, más allá de ser virtual”, contó el hombre en su denuncia.

Durante los últimos tres años, Ríos le solicitó el dinero con diferentes motivos: para alimentar a su familia, pagar el alquiler de la vivienda y las cuotas que adeudaba. “Me dijo que había sacado un préstamo, que no podía pagarlo y que había personas que le habían atacado la casa a tiros por no pagar”, contó, y aclaró que él mismo fue quien habló con el prestamista para “negociar” un tiempo de pago.

“Recuerdo que le envié ese dinero para que Leila pague el crédito. Sin embargo, estuve averiguando y me enteré que ella se había hecho una cirugía de pecho”, siguió el relató de la víctima en su denuncia judicial. El joven admitió que nunca conoció personalmente a la estafadora.

Finalmente contó: “Hace una semana ella me escribe y me dice que había accedido a un préstamo, que debía pagárselo. Ante mi negativa, recibo mensajes que me dicen que si no pago iba a sufrir las consecuencias, por lo que lo hablé con mis padres y decidí radicar la denuncia”.

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