Lo analizó Pedro Bayúgar, secretario General de Sadop, en virtud del malestar que expresan los trabajadores. También bregó para que la cláusula gatillo se cumpla y alertó sobre la suba de la inflación y su impacto en el deterioro de los salarios.

“La única esperanza es el cambio de gobierno que signifique un cambio de reglas de juego para vivir mejor”. De esa forma, Pedro Bayúgar definió el momento que atraviesa el país y, particularmente, el sector de los trabajadores. En su paso por Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario), el secretario General de Sadop e integrante del Movimiento Obrero Santafesino (MOS), indicó sobre el malestar que trasladan las bases: “Vemos que lo que falta es plata. Sale el tema de la cláusula gatillo. La preocupación es que estamos al borde de no tener para vivir”.

A eso añadió que la preocupación se extiende a que “menos hijos que se vayan a estudiar, que consigan algún trabajo; vemos que hay necesidades –enfatizó–“. “Hay un interés más que manifiesto de parte del gobierno nacional en generar necesidades”, analizó el dirigente.

Habida cuenta de las duras circunstancias, Bayúgar aseveró que “hasta el momento, la explosión social está contenida”. No obstante, remarcó que en septiembre la estampida de precios va a ser mayor mientras “los salarios no se van a recuperar”.

“Todos los trabajadores pedimos que haya compensación. No puede ser que un instrumento como la cláusula gatillo sea la única respuesta para una devaluación tan enorme como esta. Para esta situación debe haber una respuesta extraordinaria, de parte del gobierno nacional y del provincial”, sentenció el gremialista. Al respecto, fue categórico: “El gobierno nacional generó esto y el provincial fue complaciente”.

En un marco de transición entre la gestión de Miguel Lifschitz y la de Omar Perotti, la continuidad de la cláusula gatillo se volvió, en estos días, en tema de controversia. En tal sentido, Bayúgar manifestó: “Se tiene que rediscutir porque esta cláusula gatillo vence en diciembre. Hasta diciembre se tiene que cumplir. Y después se tiene que discutir con el otro gobierno. Pero lo que se tiene que discutir con este gobierno –distinguió– es cómo damos una respuesta a esta situación para los trabajadores. Los trabajadores necesitamos compensación, un bono, para este desconcierto que se ha generado”, postuló.

En ese orden, explicó que los valores inflacionarios de septiembre y octubre impactarán, cláusula gatillo mediante, en los salarios de noviembre, que se abonará en diciembre. “Esa será la solución de aquel momento, pero para hoy necesitamos otra medida y otra compensación que satisfaga al problema de hoy”, enfatizó.

Consultado sobre si los endeudamientos contraídos por la provincia podrían ser utilizados para cubrir gastos corrientes habida cuenta del momento de crisis, Bayúgar se negó a esa posibilidad. “Eso en mi cabeza es malversación de fondos. El arte de la política es realizar y dar respuestas a las cuestiones necesarias. Lo que está destinado a bienes de capital no debe ser utilizado para gastos corrientes”, opinó finalmente.

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