Mientras su abogado defensor Lucas Peirone ya fue apartado de su cargo en el Ministerio de Seguridad, trascendieron detalles de cómo el arquitecto Andrés Canteli, también detenido, formaba parte de las operaciones de traslado de estupefacientes.

La detención de Luiz Paz, involucrado en una causa por narcotráfico y lavado de dinero, tuvo su eco inmediato en la órbita política. Tal como lo anunció Rueda de Prensa, sus abogados defensores son José Alcácer y Lucas Peirone. El primero de ellos se desempeñó como asesor letrado del Ministerio de Seguridad durante la gestión de Raúl Lamberto, mientras que el segundo fue hasta pocas horas funcionario de la misma cartera que comanda Maximiliano Pullaro.

Peirone ocupaba el cargo de asistente técnico nivel dos dentro de la Secretaría de Control de las fuerzas de seguridad. En el día de ayer fue desplazado de su puesto.

El abogado de Luis Paz fue asesor del Ministerio de Seguridad

En el caso de Alcácer cabe consignar que fue defensor también de un médico, vinculado a un cartel que traficaba cocaína simulada en granos de arroz a Europa.

En cuanto a Paz, su mano derecha, Andrés Fernando Canteli, también fue detenido. Este arquitecto local fue capturado en su domicilio de Antonia Godoy 4555 el lunes pasado. Se lo acusa por los negocios de almacenamiento, transporte, control de cargas, cobranzas, de cambio de cheques, entre otras maniobras inherentes al tráfico de estupefacientes y el lavado de activos. Este hombre era unas de las pocas personas que ingresaba al country Los Molinos –donde habitaba Paz– haciendo seña de luces a la guardia. Este dato cobra relevancia a la hora de comprender el marco de impunidad con que operaba este grupo.

Asimismo, Rueda de Prensa pudo saber que el 4 de septiembre pasado Canteli formó parte del traslado de drogas de Santa Fe a Rosario en un vehículo. Si bien no transportaba los estupefacientes, pero formaba parte del propio traslado habida cuenta que Paz se movilizaba en uno de los automóviles certificando que no haya controles sobre la ruta, en el segundo se movilizaba el arquitecto que mantenía contactos con su jefe y con Hugo Díaz –un rosarino asociado al mundo de las drogas–, quien conducía el tercer vehículo. Ya en Rosario, esa droga fue destinada a la vivienda de Graciela Franco, la actual pareja de Paz.

Aquí, el análisis de Rueda de Prensa:

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