La Agencia provincial abocada a tales problemáticas logró que se efectuaran 100 allanamientos y se detuvieran 250 personas.
Entre enero y noviembre de 2018, la Agencia de Trata y Violencia de Género de la provincia recibió, en las cinco regiones santafesinas, un total de 12 mil denuncias por hechos relacionados con estas problemáticas. El trabajo de la Agencia dio como resultado que se realizarán más de 100 allanamientos y se detuvieran 250 personas en toda la provincia.
Durante 2017, la Policía de Investigaciones (PDI) fue reorganizada a nivel provincial con la unificación de todas las áreas bajo una misma conducción, con el objetivo de prevenir el delito con una mirada integral sobre el mismo. En ese marco, la Agencia de Investigaciones sobre Trata de Personas y Violencia de Género, a cargo de la directora general Marcela Romagnoli, también unificó el equipo para trabajar sobre delitos relacionados con la trata de personas y la violencia de género.
A partir de ese momento, cambió la modalidad de trabajo de la Comisaría de la Mujer, las 29 áreas de género provinciales y las comisarías dependientes de las 19 Unidades Regionales.
Si bien en la jurisdicción de Rosario la Unidad Fiscal determinó continuar con la antigua modalidad –lo que significa que se recepciona la denuncia en las comisarías locales, pasa a las áreas de género y luego a la fiscalía, para continuar con la investigación– el resto de las jurisdicciones se manejan con el nuevo sistema: las áreas de género trabajan directamente con la Unidad Fiscal y se apunta directamente al imputado, se investiga, se realizan tareas de inteligencia previa y se recolectan todas las pruebas necesarias para llegar a la condena del atacante.
Romagnoli mencionó que «esto implicó un gran cambio a nivel provincial que demandó mucho tiempo de organización, capacitación especial para el personal y una gran reorganización de tareas de los efectivos policiales» y explicó que «antes, los delitos de trata y género se trabajaban de manera independiente y se confluye en un solo equipo, es decir, ambos delitos se entrelazaron y ahora se trabajan en conjunto, lo que demanda un mayor compromiso de todas las partes».
Violencia de género
Según la Ley 26.485, la violencia de género incluye cualquier acto violento o agresión ejercida por un hombre a una mujer, en un entorno de desigualdad y dominación que puede provocar daño a la integridad física, sexual o psicológica, ya sea en un ámbito público o privado. Existen cinco tipos de violencia de género: física, psicológica, sexual, económica-patrimonial y simbólica.
En los últimos años, los hechos fueron más frecuentes y se han tornado cada vez más complejos ya que fue cambiando el modus operandi, lo que dificulta más la investigación. Sin embargo, el incrementado de las denuncias es un dato positivo, ya que «al haber mayor protección y más opciones de ayuda para las víctimas, las mujeres se animan a denunciar los hechos y se puede lograr una condena para el agresor», dijo Romagnoli.
La Regional I, que incluye a los departamentos La Capital, Garay, San Justo, Las Colonias, San Jerónimo y San Martín, ostenta el mayor índice de hechos de violencia y denuncias sobre los delitos más comunes, como las agresiones físicas, amenazas, violación ilegítima de la libertad, coacciones, agresiones sexuales, etc.
Dónde denunciar
Muchas veces, las víctimas de violencia de género no se animan a realizar la denuncia debido al temor por una agresión mayor de parte del agresor. Desde 2017, gracias a la unificación de las áreas de género, hay mayores opciones para proteger a las mujeres y velar por sus derechos. Anteriormente solo las comisarías eran las encargadas de la toma de denuncias, pero en la actualidad la provincia cuenta con diversos lugares de atención, con mayor especialización en este tipo de delitos y con una mirada integral para la investigación.
Como primera instancia, se puede llamar a la Central de Emergencias 911, o acercarse a la comisaría más cercana por jurisdicción, al Área de Género de cada localidad, a la Comisaría de la Mujer o al Centro Territorial de Denuncias. Estos organismos trabajan directamente con la Unidad Fiscal de Violencia de Género, Familiar y Sexual y permiten una mayor efectividad para la resolución del caso.
Los policías, como funcionarios públicos, tienen la obligación de actuar ante cualquier caso de violencia o abuso. Asimismo, los funcionarios policiales deben explicarle a la víctima cuáles son sus derechos y en qué consiste la instancia penal a fin de proseguir con la denuncia y detener al acusado, además de derivarla a la Agencia de Investigaciones sobre Trata de Personas y Violencia de Género para profundizar en el caso y presentar todas las pruebas necesarias.
Trabajo interdisciplinario
A fin de resguardar a la víctima, la Agencia de Investigaciones sobre Trata de Personas y Violencia de Género trabaja en conjunto con otros organismos estatales como la Policía de Investigaciones; el Departamento de Inteligencia; la Brigada Antinarcóticos; la Unidad Fiscal de Violencia de Género, Familiar y Sexual; el Juzgado de Familia y de Menores; y la subsecretaría de la Niñez; como así también con médicos, psicólogos e instituciones que trabajan esta temática.
Hoy existen muchos recursos para un mejor abordaje de los casos de violencia de género o de abuso y se pueden tomar medidas preventivas o urgentes para evitar que la situación empeore. Entre ellas se destacan:
-Prohibición de acercamiento al lugar de residencia, trabajo, estudio, esparcimiento
-Cese de los actos de perturbación o intimidación
-Restitución inmediata de los efectos personales, en caso de ser privada de los mismos
-Prohibir al presunto agresor la compra y tenencia de armas y ordenar el secuestro de las que estuvieren en su posesión
-Brindar asistencia médica o psicológica a través de los organismos públicos y organizaciones de la sociedad civil con formación especializada en la prevención y atención de la violencia contra las mujeres
-Ordenar medidas de seguridad en el domicilio de la mujer
-Ordenar toda otra medida necesaria para garantizar la seguridad de la mujer que padece violencia, agresión y maltrato del agresor hacia la mujer.