Se trata de la población indigente que no reúne el costo de la Canasta Básica. José Luis Zalazar, de Los Sin Techo, alertó sobre la cantidad de trabajadores asalariados que son pobres.
La pobreza en nuestro país alcanza al 44,7% del total de la población y al 62,9% de los niños y adolescentes; mientras la indigencia se ubica en el 9,6%. Estos dramáticos datos se desprenden del último informe elaborado por el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina –dado a conocer días atrás– y corresponden al tercer trimestre de 2023. Acerca del panorama que representan tales porcentajes, es menester enfocar la mirada en el Gran Santa Fe donde se localizan unas “13 mil familias indigentes, a las que no les alcanza para comer”, según precisó José Luis Zalazar, integrante de Los Sin Techo.
“Hoy para no morirse de hambre, una familia con dos adultos y dos chicos necesita 160 mil pesos. Y no los tienen. Con la Asignación Universal por Hijo, la Tarjeta Alimentar y algunos refuerzos que se hicieron en los últimos meses, le falta unos 60 mil pesos”, consignó el militante social en diálogo con ATP (entrevista que se podrá ver este domingo, a las 23, por Somos Santa Fe y Somos Rafaela; y a las 21, por Somos Rosario).
Así las cosas, “las changas bajaron”. Es decir, los ingresos de quienes realizan trabajos temporales, relacionados a la albañilería, la pintura, el empleo doméstico, el corte de pasto, entre otros, ya no son los mismos porque se redujo la demanda de esas tareas. Con la falta de empleo y la imposibilidad de adquirir productos de la Canasta Básica Alimentaria, esas 13 mil familias no alcanzan a cubrir sus necesidades nutricionales, acorde a lo manifiesto por Zalazar.
“Si se ganan 350 mil pesos, una familia es pobre –recalcó–. Es grande la franja de la pobreza. Vemos que son personas que están dentro del sistema porque tienen obra social y seguro social. Están dentro de la cancha, ven el partido que vemos todos –graficó–. Los que no ven el partido son los que están afuera. Ese es el problema serio: el 9,6% de indigencia que no se alimenta. Es una olla a presión”, alertó.
