Referentes de Incuba e Igualdad destacaron el trabajo de emprendedores, artesanos y manualistas que exponen sus producciones en distintos espacios de la ciudad.
Las ferias de emprendedores y emprendedoras se pueden encontrar en distintos puntos de la ciudad de la mano de la unión de fuerzas. Tal es el caso de Incuba que surgió hace tres años con “el incentivo de crear un espacio para mujeres que hoy está abierto a todo el público”, comentó la referente del espacio Fiorella Antonelli en su paso por ATP. De esa forma, “la grupalidad” se vuelve una premisa de la autogestión que, en el caso de Incuba, agrupa a más de 300 emprendimientos.
Por su parte, León Liponezky, uno de los promotores de la Feria Igualdad, puso el acento en la relevancia social de las ferias. “Es una salida laboral de muchas familias que vienen sufriendo la crisis y que se acentuó con la pandemia. En muchos barrios fuimos creando diferentes ferias para abrirle espacio a la economía social y solidaria, para dar una mano y que sea una fuente de ingresos. A veces, esta actividad es el único ingreso”, planteó.
Antonelli como Liponezky coincidieron en remarcar el trabajo de artesanos, artesanas, emprendedores, manualistas y feriantes, quienes día a día deben trabajar para llegar al día de la feria con su producción, más lo que implica publicitar sus tareas. Los testimonios completos, en el siguiente video.
