El jefe del MPA cuestionó que “la remoción” quede en manos de la Legislatura. Y diferenció lo que ocurre con los altos cargos del Ministerio Público que deberían tener un jury.
Durante 2021, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) tramitó 239 mil denuncias. Según precisó el fiscal General, Jorge Baclini, se trata de una cifra “muy importante”. “Este número marca, además, más de 600 casos diarios. Desde 2014, cuando comenzó el nuevo sistema, este número se fue incrementando progresivamente. Si se contemplan todos los años, llegamos a más de un 1.700.000 casos”, detalló en contacto con ABC1 (que se emite este domingo a las 23 por Somos Santa Fe y Somos Rafaela; y a las 21, por Somos Rosario). Al respecto, el jefe del MPA aclaró que “no todos los casos ameritaron investigaciones”.
“Nuestra tarea no se da únicamente en función de la política criminal contra el delito, sino también se da en articulación para preservación la autonomía y la economía del Ministerio Público”, agregó Baclini. En ese sentido, el funcionario apuntó a que hoy día “la remoción de los fiscales” está en manos de la Legislatura, lo cual “genera un condicionamiento para el trabajo diario”. No obstante, “esto no quiere decir que cualquier órgano público no tenga control. Pero ese control, el mejor posible, implica que no se genere la injerencia de un poder en otro”.
Dicho de otra forma, “el fiscal, que desarrolla tareas jurisdiccionales no puede ser juzgado desde una visión política”. Es decir, “pedimos que los fiscales, ante falta disciplinarias, sean tratados desde una vara jurídica, no desde una vara política”. De lo contrario, “se genera una doble vara: los fiscales hacen tareas jurídicas y el juzgamiento es político”, argumentó Baclini y diferenció el caso de los altos cargos del MPA que “sí deben tener un control político porque también hay que establecer lazos entre los órganos del Poder Judicial y el Poder Legislativo”.
Así las cosas, Baclini planteó la necesidad de retomar el sistema de la ley originaria que “es similar al sistema de juzgamiento de los jueces”, lo que sería un jury de enjuiciamiento.
