Se sumó a un procedimiento en donde, junto a otros cuatro policías, benefició a dos narcotraficantes locales. Falsearon el acta para mejorar originariamente la situación de los detenidos.
El fiscal federal de Santa Fe Walter Rodríguez pidió en las últimas horas la indagatoria de cinco efectivos policiales de la URI, entre ellos el actual jefe del Comando Radioeléctrico, por encubrimiento, falsedad ideológica y desaparición de rastros del delito, agravado por la gravedad –tráfico de drogas– y por tener ánimo de lucro.
Para llegar al pedido de las indagatorias, el fiscal reconstruyó un procedimiento que se llevó a cabo el 6 de junio pasado en el norte de la ciudad, en la zona del camino viejo a Esperanza. Ese día, en horas de la tarde, personal del Comando Radioeléctrico, en un móvil a cargo del oficial Exequiel Armelino y la suboficial Belén Jobson, detuvo a dos personas que se trasladaban en una camioneta Amarok, identificados como Alberto Sotelo y Mario Mertes, éste último dueño del vehículo. Al ser requisado la camioneta se halló debajo del asiento del acompañante una balanza de precisión y una caja de cartón que contenida una sustancia blanca compactada. En ese entonces solicitaron refuerzos en el lugar y dos testigos de actuación.
Al lugar del hecho llegó el sub inspector Cristian Martin en el móvil 8736. Unos minutos después llegaron el subcomisario Luis Morales –jefe del CRE de Santa Fe– y el móvil 8671 con el oficial Gustavo Méndez, que arribó con los dos testigos. Se constató la presencia de la caja, la balanza, un celular y la billetera de Mertes con poco más de tres mil pesos. Luego tomó intervención la División Regional Operativa 1 a cargo de la AIC que por intermedio del sub inspector Matías Palacios labró el acta donde se ingresa el dato del resultado del reactivo con los 29 gramos de cocaína.
El 18 de octubre, Mertes fue indagado por infracción a la ley federal de drogas, no solo porque el fiscal y el juez valoraron que la balanza y la droga fraccionada eran indicios de comercio, sino porque había una investigación en curso sobre su persona y su posible accionar narco en la justicia. Sotelo está prófugo. El 5 de octubre, el fiscal pidió que sean investigado e imputados los policías que participaron del procedimiento por inconsistencias en el acta. El primer indicio fue una conversación entre Mertes y otro hombre en el que le cuenta sobre el hecho.
“Recién me largan de drogas, me engancharon con la balanza y 135 lucas y 80 gramos, no me sacaron la camioneta pero me sacaron las 135 lucas…”. Ahí ya hay un dato contradictorio al acta: se habla de 80 y no 29 gramos y de un dinero que no figuraba en el acta. Esa mentira o falsedad posibilito que el juez dispusiera entonces la libertad ambulatoria de los detenidos Sotelo y Mertes.
Es por ello, y sin perjuicio que aparezca nueva prueba en la causa y extienda el mapa de responsabilidades, el fiscal pidió la indagatoria de Armelino, Jobson, Martin, Morales y Méndez.