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Así lo dijo el secretario general de Amsafe La Capital y recalcó que “es mentira que no queremos volver a las aulas”. Sostuvo que no es posible comparar la apertura de los bares con las escuelas debido a la cantidad de personas que se movilizan en uno y en otro ámbito.

La discusión acerca de la presencialidad en las escuelas lejos está de terminar y por el contrario, recién empieza.

Desde el gremio de los docentes estatales. Rodrigo Alonso, secretario general de Amsafe La Capital sostuvo que para la vuelta a las aulas deben tenerse en cuenta tres ejes: la cuestión sanitaria, la vacunación y la situación edilicia.

En diálogo con el programa televisivo Apto para Todo Público, el dirigente indicó que “el primer escenario de la discusión debe partir de una evaluación de lo que fue el 2020, el 19 de marzo, el gobierno de la provincia, por 6 meses cerró la discusión paritaria en todo lo que tenía que ver con la vida escolar, todas las decisiones fueron unilaterales”.

Agregó que “este año el gobierno debe decir cómo está pensando el ciclo 2021, nosotros debemos decir cuáles son nuestras necesidades como docentes y a partir de ahí poder diagramar cuestiones que para nosotros son sumamente importantes”.

En ese sentido, Alonso destacó que “estamos convencido de que la presencialidad es sumamente importante, no hay proceso de enseñanza aprendizaje sin presencialidad”.

También mencionó que “es mentira que no queremos volver a las aulas, nosotros queremos la presencialidad, es necesaria por cuestiones pedagógicas, psicológicas, sociales, pero también decimos que no debe ser a cualquier costo, sino que debe haber condiciones”.

Recordó que “en noviembre hubo presencialidad en algunos departamentos del centro norte de la provincia, discutiendo con directivos, supervisores, presidente comunal, comunidad educativa, en diciembre hubo presencialidad homogénea, que ellos llamaron revinculación, en el pico de la pandemia en el departamento La Capital”.

Alonso se pronunció por que “lo primero que hay que hacer es discutir la situación sanitaria, no se puede permitir la presencialidad en una situación sanitaria en un contexto adverso, lo segundo son las condiciones de trabajo, para llevar adelante la presencialidad”.

Remarcó que “escuché muchas veces la comparación entre los bares y las escuelas, porqué se abren los bares y no las escuelas, ¿saben cuántas alumnos y alumnas hay en Santa Fe? 900 mil, y 100 mil docentes, todos y todas deberían salir”.

Por último, sostuvo que “el tema salarial no está cerrado”.

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