Lo indicó el interventor Mauricio Caussi, en función del Presupuesto aprobado por Legislatura que no contempla tarifas y paritarias. El funcionario también delineó las prioridades, el plan de austeridad y la renegociación con Cammesa.
“Una EPE más cerca del sector productivo, que trabaje más en disminuir las profundas asimetrías regionales, que sea más protagonista en los espacios nacionales donde se define la política energética en general; es decir, una EPE más cerca de la gente”. De esa forma, Mauricio Caussi, interventor de la Empresa Provincial de la Energía, definió las premisas básicas dispuestas por el gobierno provincial. En una entrevista que brindó a ABC1 (que se emite este domingo a las 23, por Somos Santa Fe y Somos Rafaela, y a las 21 por Somos Rosario).
El funcionario hizo hincapié, al mismo tiempo, en el déficit de la empresa estatal que alcanza los tres mil millones de pesos, vale decir, el 7,5% del presupuesto de la propia EPE de 2019. “Las perspectivas son más complicadas. El Presupuesto que aprobó la Legislatura contiene casi 51 mil millones de pesos para la EPE, pero sin ajuste de tarifas y sin paritarias”, consignó y estimó que aquel déficit se podría elevar a 10 mil millones de pesos. En este contexto, Caussi remarcó que los ingresos solo provienen de los usuarios que son 1.200.000 en toda la provincia.
Al mismo tiempo, precisó que cada cinco pesos que se la paga a Cammesa (la distribuidora mayorista), “uno no lo cobra, se pierde en cuestiones no técnicas y no son los casos sociales, sino fraudes o robos de energía”, aclaró. Habida cuenta del panorama que se presenta, se conformó un Consejo Consultivo Eléctrico, formado por exfuncionarios de la empresa que trabajan ad honorem. En ese marco, se ha pedido la reformulación del presupuesto y se ha establecido “un plan de austeridad”. Asimismo, se apuesta a una “inversión inteligente que genere de manera rápida dividendos”. Caussi, a su vez, exaltó “el muy buen capital humano” con el que dispone la EPE, lo cual se comprobó “ante las inclemencias climáticas del 12 de diciembre (2019) y 48 horas después”.
En función del primer cuatrimestre del presente año, el interventor se mostró “optimista, pero realista”. En otras palabras, “la gran diferencia es que hasta hace poco más de un mes sentíamos que estábamos mal y que íbamos hacia el iceberg; eso ha cambiado, hay expectativas diferentes, la gente tiene esperanzas y por eso el cambio”, esgrimió. No obstante lo cual, “habrá dificultades”. “Tenemos que trabajar mucho, ser solidarios”, postuló y evocó la decisión del congelamiento de salarios para la plana gerencial de la empresa. En tanto, definió: “Cada peso que podamos ahorrar, es un peso que le estamos defendiendo a los santafesinos”.
En paralelo, el funcionario apuntó a la necesidad de renegociar con Cammesa a los fines de que “tenga consideración con la provincia de Santa Fe”, así como que el Estado nacional “provea del financiamiento”. También destacó “el muy buen diálogo” sostenido hasta ahora con los gremios a instancias de “darle mayor productividad a la EPE”. “Tenemos que ser eficientes en la asignación de las horas extras y en cómo direccionamos la inversión”, señaló.
Consultad sobre las posibilidades de contar con recursos de créditos, Caussi manifestó que las confianzas están depositadas en el equipo de Economía, que tutela Walter Agosto. Asimismo, aseveró que “no deben haber congelamiento de salarios porque los trabajadores tienen que dejar de ser la parte más delgada por la que se corta el hilo”. Al margen de ello, expresó que el congelamiento de las tarifas es un tema ya planteado desde “antes de la campaña (porque) la dinámica que traían las tarifas era perversa para los bolsillos de los argentinos y para la competitividad de las empresas”. Al respecto, indicó que la decisión del exgobernador Miguel Lifschitz de no trasladar aumentos redundó en “940 millones de pesos que la EPE dejó de recaudar y que explica en parte el déficit de tres mil millones”.
“Durante el 80% del mandato de Lifschitz se acompañaron los aumentos de tarifas que venían de Nación. Un 400% aumentaron las tarifas durante los últimos cuatro años. Hubo una política provincial de aumento, no de congelamiento”, recalcó y argumentó que un congelamiento por 180 días depende, ahora, de “las decisiones nacionales, del contexto que encontramos en la empresa y de que le den al gobierno herramientas”, en alusión a los pedidos de emergencia que lanzó el Ejecutivo provincial.
En tono de autocrítica, el funcionario también expuso que “no era bueno el modelo de los últimos años del kirchnerismo de sostener un esquema tarifario en el cual la energía no valía nada” para ir “al otro extremo, que fue el gobierno de (Mauricio) Macri”. Acorde a una línea razonable y la disminución de subsidios, “no se trabajó al interior del esquema porque sigue siendo mucho más barata en los barrios más pudientes de Capital Federal”, cuestionó.
