El caso Alvarado acapara la atención de los últimos días. No es para menos ya que se trata de un reconocido narco en la cima del mundo delictivo. En su juicio, se escuchó un audio de una conversación con su abogado, en el cual la nombra a la vicegobernadora electa.

El líder narco Esteban Lindor Alvarado está siendo investigado, junto a cuatro oficiales de la policía santafesina y otros dos civiles. El pasado fin de semana todos terminaron detenidos e imputados por formar parte de una asociación ilícita y lavar activos provenientes de esos delitos.

Alvarado estuvo preso en la provincia de Buenos Aires por un tiempo de cinco años debido a que era líder de una banda que robaba vehículos de alta gama, corte o desguace y la posterior venta de esas autopartes. Por aquel tiempo Alvarado había ganado el apodo de “El Rey del Corte”.

Cuando recuperó la libertad volvió a Rosario y tomó contacto con Luis Medina, otro reconocido narco de la ciudad de Rosario (fundamentalmente entre 2012 y 2013). Juntos armaron una sociedad delictiva y coparon la escena en el norte de la ciudad de Rosario.

Alvarado no había estado hasta entonces en el primer plano del hampa porque todavía la banda Los Monos tenía todo el protagonismo.

En todo este tiempo, Alvarado aprovechó para hacerse fuerte sin que nadie vaya notando su carrera, salvo los círculos policiales o judiciales cercanos.

Sin embargo, ocurrió algo inesperado que está atado al asesinato del financista Lucio Maldonado en noviembre de 2018. La víctima fue secuestrada, torturada en una camioneta tipo utlilitario hasta que lo asesinaron. Posteriormente fue arrojado a la vera de la circunvalación con un cartel que decía “con la mafia no se jode”.

La banda que torturó y mató a Maldonado tuvo la desinteligencia de no desactivar el GPS que tenía el vehículo y ese elemento hizo que fuera encontrado.

Mediante la investigación se pudo establecer que los asesinos eran dos sicarios vinculados a Alvarado.

La investigación siguió su paso y también se pudo detectar que el jefe de inteligencia de la Policía de Investigaciones Javier Makhat tenía un vínculo de sociedad en un fideicomiso con Alvarado o con personas vinculadas a él. Por este motivo el policía fue detenido, luego puesto en libertad, pero continuó siendo investigado y hace pocos días volvió a quedar tras las rejas.

Posteriormente, un testigo de identidad reservada se incorporó a la causa y dijo que en una isla, frente al Monumento a la Bandera, pero jurisdicción de Entre Ríos tenía una casa Alvarado.

La jueza de esa jurisdicción entrerriana autorizó el operativo solicitado por la justicia santafesina, pero la magistrada pidió también la presencia de la Prefectura, para evitar cualquier malentendido.

El procedimiento en ese inmueble comenzó el 5 de diciembre, pero inmediatamente quedó frustrado porque aparecieron en una lancha dos abogados (uno de ellos que luego fue el defensor de la esposa de Alvarado), Isidro Llonch, Jorge Llonch y con la actual diputada nacional Alejandra Rodenas.

Jorge Llonch se anunció como un inquilino del inmueble y tras esto participó de lo que quedaba del procedimiento.

Alvarado, en febrero, fue detenido en un camping en Córdoba y al momento de ser detenido quiso deshacerse de un teléfono celular arrojándolo a un lago que tenía cerca, pero no logra su cometido porque el aparato no llegó al espejo de agua. El teléfono finalmente quedó incorporado a la causa.

La justicia provincial también le atribuye a Alvarado los ataques a los edificios de la Justicia en Rosario.

En este hilo de hechos también se comprueba que muchos policías brindaban información a Alvarado sobre procedimientos policiales o judiciales que ponían en peligro el accionar delictivo de la banda. Por esta situación, dos policías más quedaron detenidos.

Mas adelante, Claudio Tavella, abogado de Alvarado, también quedó detenido porque la justicia entendió que ya era parte de la banda y no sólo un asesor jurídico de la misma.

El viernes pasado comenzaron a llevarse adelante las audiencias imputativas por el juicio y las personas que habían sido apresadas fueron imputadas y acusadas de formar parte de la banda de Alvarado.

En la audiencia del sábado pasado, los fiscales de la causa pidieron hacer público un audio que reproduce una conversación entre Alvarado y Tavella. El líder narco le dice a su abogado que está agotado de la situación y que la policía le está pisando los talones. Pero el detalles está en que también le pide que “desmenuce el terreno y la pida una mano a la Rodenas”. El audio expuesto no tiene relevancia jurídico penal, pero sí tiene un peso político enorme.

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