Se trata de Omar Odriozola, ex mandamás de la fuerza en 2015. Además fue imputado Hugo Miños, el encargado de logística en ese entonces.

En septiembre de 2017 una investigación del entonces Fiscal Roberto Apullán culminó con la detención del jefe policial Rafael Grau, el Comisario Ariel Hernán Villanueva, José María Leiva, un propietario de un lavadero y otro de un taller mecánico.

La pesquisa nació en el marco de una denuncia anónima en el ministerio de Seguridad que daba cuenta de una serie de arreglos que debían hacerse a los autos de la policía. Pero eran facturados con sumas de dinero exhorbitantes, pero que en realidad los vehículos no tenían nada que arreglar o no tenían arreglos practicados.

Por esta causa fueron detenidas ocho personas en principio, entre ellas Rafael Grau.

Siete de esas ocho personas se acogieron al beneficio del juicio abreviado por lo cual han recibido multas, recibido sanciones y sortearon la persecución penal de esta forma.

Sin embargo, Grau insiste con su inocencia e ira a juicio oral en este sentido.

Pero la investigación llegó en el tiempo hasta enero de 2015. En ese periplo se puso la lupa sobre el ex jefe Omar Odriozola y el encargado de la logística Hugo Miños. Ambos fueron imputados esta mañana.

A Odriozola se le endilgaron dos cargos: asociación ilícita y defraudación al estado.

Odriozola fue designado en el cargo por el entonces ministro de seguridad Raúl Lamberto.

Artículo anteriorEl modelo mall se instala en la ciudad
Artículo siguienteUna carta típica de la región en el puerto