Una denuncia anónima por graves hechos al candidato Emilio Jatón finalmente fue desestimada. Un hecho luctuoso entre militantes que termina en la muerte de uno de ellos. Una crónica sin muchos escrúpulos.
El pasado 30 de marzo los santafesinos conocieron la noticia sobre la feroz agresión agresión en un confuso episodio al parrillero Horacio Borda, quién falleció luego de pasar meses en el Hospital Cullen, producto del golpe recibido en esa ocasión.
La situación tuvo la intervención de la justicia, por lo cual la investigación del caso llevó a detener al agresor material, identificado conocido como “El Pelado” Toledo, sobre quien hoy pesa una medida de prisión preventiva. El sindicado como el autor de la agresión a Bordas es hijo de Roberto Toledo, un militante del socialismo.
La parrillada de la cual era propietario Borda, funcionaba como un habitual lugar de reunión de los militantes radicales del sector afín a Leonardo Simoniello.
Por su parte, lo del lado de Toledo militaban para la campaña de Emilio Jatón y Paco Garibaldi.
Al parecer, dos días antes de la feroz agresión a Borda que terminó con su muerte, el grupo de Simoniello le reprochó una actitud negativa a los de Garibaldi. Concretamente el reclamo pasaba por descolgar pasacalles y elementos de campaña rival.
En este contexto, una mujer en condición de anonimato envió un email a la Jefatura de Gabinete de Ministros. En el escrito, quien lo efectuó hace un relato con un fuerte contenido jurídico, legal y “fino” del modo en que Toledo estaría vinculado a una red de trata en Santa Fe. Además, el texto tenía referencias acerca de una supuesta connivencia política, cuyo principal paraguas de impunidad era Emilio Jatón. También se mencionaba que Toledo organizaba fiestas con prostitutas, travestis y streepers en un local del centro de la ciudad de Santa Fe.
Como si fueran pocas las imputaciones realizadas, también mencionaba a Emilio Jatón como un implicado por regentear prostíbulos en la ciudad de Santo Tomé. En este punto, se adjuntaban direcciones de domicilios exactas.
A pesar del esfuerzo de la mujer anónima, la denuncia fue desestimada el pasado 5 de agosto. La causa del rechazo fue tan simple como contundente: ausencia de datos fehacientes.
El trámite que siguió “la denuncia” fue: la presentación en la jefatura de Gabinete de Ministros, luego se envió al organismo estatal encargado de la investigación de casos de trata de personas, y luego desde allí a la justicia federal de Santa Fe.
La denuncia incurría en una serie de vaguedades que no conducían a nada, ni siquiera se sumó un apodo como dato concreto.
Sin embargo, y a pesar del cuidado anonimato, dentro de la denuncia aparece un dato consistente en una captura de pantalla de whatpsapp.
Allí, aparece un perfil que responde al nombre de Robert Dalí y mantiene una conversación con una mujer cuya foto y fisonomía se corresponden con María Cecilia Battistutti. Esta última es la actual secretaria de Desarrollo Social del Municipio y previamente fue secretaria privada de Corral, antes de ser intendente.
Cotejando el perfil de la cuenta de Facebook de Battistutti se puede apreciar la similitud de algunos comentarios que allí aparecen con los vertidos en la “denuncia anónima” desestimada por la justicia federal santafesina.