Así lo explicó Walter Govone, de la Cámara de Empresarios y Corredores Inmobiliarios. También comentó de qué manera repercute el valor del dólar en el costo de los inmuebles y cómo altera el mercado.
Walter Govone, integrante de la Cámara de Empresarios y Corredores Inmobiliarios, sostuvo que el sector no se encuentra ajeno a lo que ocurre con la economía del país. “Para poder acceder a la vivienda es necesaria la ayuda financiera, a través de los bancos o a través de los créditos hipotecarios. Esas líneas de crédito están vigentes, pero prácticamente nadie las está tomando porque las cuotas se ajustan por inflación y, hoy por hoy, se tornan muy poco accesibles”, describió en diálogo con ABC1 (que se emite este domingo, a las 23 por Somos Santa Fe y Somos Rafaela y a las 21 por Somos Rosario). Al respecto, remarcó que, en la actualidad, las cuotas han llegado a duplicar el valor de un alquiler.
Créditos
“Mientas tengamos tasas similares y una inflación cercana al 57% interanual, las cuotas se van a ir ajustando de una manera mucho más rápida de los ingresos que tienen los grupos familiares”, esgrimió el dirigente. La repercusión inmediata se produce en el mercado inmobiliario que encuentra dificultades para la compra venta. “Aquellos que tienen que acceder a la primera vivienda, que generalmente es gente joven, no está participando del mercado”, remarcó. Particularmente sobre los denominado créditos UVA, el empresario aclaró que “están muy bien pensados, pero en países con altos índices inflacionarios no funcionan”.
Consultado sobre las permutas y el pago de diferencias, Govone comentó que “ese tipo de operaciones son las que hoy están en el mercado. El mercado no está súper activo, pero son las pocas operaciones que se están haciendo y también quienes adquieren unidades de inversión a través de los fideicomisos que pueden hacer pagos en cuotas que las mismas empresas constructoras financian”. De todas formas, este sector “es bastante chico” con relación con el total del mercado.
Dólar
En virtud de las corridas cambiarias, expresó que “cada movimiento abrupto en la moneda extranjera produce un efecto negativo” habida cuenta de la pérdida de seguridad sobre los precios de los valores relativos de los inmuebles. “En este momento hay una estabilidad que ayuda a que de a poco se reactive, pero el inversor siempre lo mira de reojo porque sabe que son períodos cortos de tiempo. Necesitaríamos que fuesen largos períodos”, subrayó.
Al respecto, consideró “fundamental poder fijar el valor de ofrecimiento del inmueble en el contexto económico que se está presentando”. No obstante, es preciso tener en cuenta que a la par de la devaluación se registra un 50% de inflación interanual. Dicho de otro modo, la clave es “saber cuánto cuesta y a cuánto se puede vender en el contexto económico”.
