Luego de alusiones a “chantajes y extorsiones”, los legisladores reclamaron que de contar con certezas el gobernador se presente ante la justicia. Ricardo Olivera, presidente del partido a nivel provincial, consideró “inapropiada” la expresión del jefe del Ejecutivo.
Días atrás y en el marco de un acto partidario en un salón de Festram, el gobernador Miguel Lifschitz instó a que el Frente Progresista ocupe un mayor número de bancas en el Senado provincial para ponerle fin a los “chantajes y las extorsiones”. Los dichos no cayeron bien el en seno del Partido Justicialista (PJ) y, ayer, su presidente lo manifestó en Rueda de Prensa.
“Fue inapropiada la opinión. Por su investidura hay que ser prudentes. Fui 12 años senador y la pelea que se da por los recursos tiene que ver con cada departamento. Todo lo que se hace desde las cámaras legislativas está aprobado en el presupuesto”, planteó con énfasis Ricardo Olivera.
De esa forma, el dirigente rechazó los márgenes para posibles extorsiones e indicó que un grupo de senadores presentó un proyecto “pidiendo la rectificación y, en caso contrario, que (el gobernador) se presente a la justicia”. A propósito, el titular del PJ santafesino remarcó que Lifschitz “convivió con este grupo de senadores durante cuatro años” y estimó que “el hecho de que no haya salido la Reforma (de la Constitución) pudo haber alterado algunos ánimos”. E insistió: “Fue muy inapropiada la opinión”.