Tras una maratónica sesión que comenzó a las 11:24 del miércoles, los legisladores dieron una histórica media sanción al proyecto que ahora será debatido por la Cámara alta.
Sin embargo, las buenas noticias para los diputados que impulsaban el «sí» llegaron en la última hora, pasadas las 8, con el giro en las posiciones de los peronistas pampeanos Melina Delú y Ariel Rauschenberger, que al límite de la votación revelaron que lo harían a favor.
La confirmación del voto positivo del radical puntano José Riccardo, que había esbozado una posible abstención; y el sorpresivo reposicionamiento del macrista fueguino Gastón Roma, a favor del proyecto, terminaron de ampliar la diferencia para llegar al 129 a 125.
La peronista cordobesa Alejandra Vigo fue la única que se abstuvo en una sesión que, como casi nunca sucede, tuvo asistencia perfecta; descontando la obvia ausencia del kirchnerista Julio de Vido, suspendido como legislador.
La sesión dejó como postal final el abrazo entre diputados de diferentes bancadas, aún entre los que en los debates políticos tienen posturas radicalmente diferenciadas, como kirchneritas, peronistas, massistas y oficialistas.