Desde enero sólo mantiene contacto por medio de videollamadas, sólo cuando la otra parte no lo impide. La justicia no respondió presentaciones hechas y tiene dilaciones. «Mi hija pide verme», dice su madre.
Flavia Galván pelea judicialmente por ver a su hija Helena, se trata de un caso de disputa de comunicación entre una madre y su hija.
La otra mamá de la niña la tiene consigo desde enero y no le permite verla a Flavia, que fue quien tuvo en su vientre a Helena.
La otra madre de la pequeña, según señala Flavia es abogada de familia y utiliza vínculos de este oficio y trabajo para trabar el proceso judicial.
La situación en medio de la pandemia se ve agravada, ya que la lucha y la puja de Flavia se mantiene desde hace varios meses, incluso antes de la cuarentena.
«Estábamos casadas hace siete años, y convivíamos hace nueve, de ahí nació nuestra hija que va a cumplir cuatro años», dijo Flavia al programa televisivo Apto para Todo Público.
«Se me hace muy difícil poder hablar, ayer se cumplieron siete meses de esta tortura lamentable que estoy viviendo y no tengo respuesta de la Justicia, ni de la otra mamá, es imposible llegar a un acuerdo», sostuvo.
«Esto se inició la primera semana de enero, con una denuncia de violencia familiar, un día llegó la policía a la casa en la cual vivían ambas, la desalojaron a Flavia con unas pocas pertenencias», recordó Melisa Morra, abogada de Flavia.
«A partir de allí comenzó un camino en la Justicia en el que se solicitó el levantamiento de la medida porque no tenía ningún sustento fáctico, no había ningún hecho que avale esa medida, hicimos cerca de siete pedidos de audiencias, pero nunca nos llamaron», sostuvo.
«Estamos peleando desde enero para poder ver a mi hija, la llevé 9 meses en mi panza, le dí de amamantar dos años y tres meses y de repente me la arrancaron sin ninguna causa y la Justicia no me la da, y día a día tengo que estar esperando por una respuesta que no tengo», dijo Flavia.
«La restricción fue dictada por 60 días, y por una presentación de la otra parte, sin fundamento fue prorrogada por 60 días más, en el medio de la situación se dicta la cuarentena que empeora muchísimo las cosas, presentamos un régimen de comunicación provisorio que está vigente, a los pocos días del inicio de la causa, se le corrió vista al defensor que es la autoridad el derecho de los menores y nos contestó la vista haciendo lugar a nuestro pedido», afirmó Morra.
«Necesito a mi hija y mi hija me necesita, con ella hago videollamadas cuando la otra parte me deja, estuve incomunicada con mi hija por semanas, ayer no pude hablar, no me contestan las llamadas y mi hija me pide por favor que quiere verme, me pide por favor, ella está desesperada», dijo Flavia en medio del llanto.
«Llegamos al día de hoy con una nueva vista al defensor sin que la Justicia permita el contacto provisorio, no hay hechos de violencia, hemos presentado jurisprudencia que permitió el contacto entre hijos y padres en cuarentena, de hecho hay un permiso especial para el traslado de los menores y el traslado de los padres , es inentendible y no existe un fundamento legal para llegar a esta situación», sostuvo la abogada.
«Yo sé que para la Justicia es un caso más, pero para mí es mi vida, desde que nació siempre la tuve yo, me dediqué a ser ama de casa para cuidar a mi hija y de la noche a la mañana me la arrancaron, quiero que la Justicia haga algo, que me escuche nada más», finalizó Flavia.