Así lo analizó el historiador Alejandro Olmos Gaona, en virtud de las negociaciones que el gobierno nacional lleva adelante con el FMI. “Si llega a haber algún ajuste, con el estado en que está Argentina, no sé lo que puede llegar a pasar”, advirtió.
Alejandro Olmos Gaona es un destacado historiador argentino que se ha dedicado a lo largo de muchos años de estudiar la deuda pública en nuestro país. En momentos que se define la situación con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el especialista se refirió a la postura del gobierno nacional en relación con “negociar y acordar con el Fondo”, así como otra posición “que dice que no hay que acordar”. A su vez, “en el gobierno se dice que se va a acordar con el Fondo sin ajuste, sin condicionamientos. No creo que el Fondo acuerde con Argentina a cambio de nada”.
En comunicación con ATP, Olmos Gaona apuntó que la historia del FMI, desde 1957 hasta la fecha, “muestra que siempre tuvo exigencias”. “Hay una realidad: el Fondo no va a acordar con el gobierno si el gobierno no tiene un plan concreto que mostrarle. El Fondo va a plantear exigencias, quizás sean un poco más flexibles, pero de ninguna manera va a ser a cambio de nada. Creo que ya hay un acuerdo –estimó–, se están puliendo detalles, porque Argentina no va a entrar en mora. No pagarle al Fondo no es entrar en default, como dicen equivocadamente muchos”, aclaró.
Asimismo, el historiador opinó que “Argentina no debería acordar con el Fondo, no debería pagarle, y ver qué pasa con un plan económico serio en los próximos años. Si hacemos un acuerdo, no tenemos plata para pagarle”. En rigor, el acuerdo implica “que el Fondo nos de plata y con esa plata pagarle, lo que significa que la deuda seguirá creciendo”. En otras palabras, planteó que “el gobierno debería tomar algún otro tipo de decisión”. “Pareciera que si no acordamos va a haber una tragedia de consecuencias imprevisibles, pero no dicen cuál va a ser la tragedia”, advirtió sobre los mensajes provenientes tanto desde el oficialismo como desde la oposición ante un eventual default. “Si no acordamos con el Fondo, digan exactamente que va a hacer el Fondo”, esgrimió.
Por otra parte, el FMI “no puede embargar a Argentina, tiene procedimientos a seguir con un país que no le paga y estos procedimientos llevan mucho tiempo, hasta dos años”. “Creo que el gobierno argentino debería tomar otras medidas, porque si llega a haber algún ajuste, con el estado en que está Argentina, no sé lo que puede llegar a pasar. El Fondo fue implacable con Grecia y no le importó la gravedad de la situación”, advirtió.