Miguel González, exministro de Salud durante la gestión de Miguel Lifschitz, realizó una semblanza del referente socialista fallecido ayer. Destacó su “capacidad de trabajo” que lo convirtió en “imprescindible”.
El adiós a Miguel Lifschitz aún parece impensado, aunque su diagnóstico de salud era crítico. En palabras del exministro de Salud, Miguel González, se trata de un momento de “gran conmoción” no solo para quienes estuvieron cerca del exgobernador, sino también “para la gente que ha apreciado su tarea, su trabajo”. “El golpe es doble porque tiene que ver con lo que pensamos como figura política y, también, nuestro vínculo personal que se construyó durante tantos años. Nos parece mentira que estemos casi en una película”, sostuvo el también exsenador por el departamento La Capital, este lunes, en comunicación con ATP.
González hizo un repaso sobre el acercamiento que mantuvo con Lifschitz a partir del vínculo que se construyó en nuestra ciudad. “Fue una persona con un enorme compromiso con sus ideas, con una escucha muy fuerte. Tenía cierta parquedad, pero a su vez, una cercanía para escuchar, una mirada atenta hasta en el mínimo detalle. Quienes compartimos la gestión pública, hemos reconocido en él una tenacidad enorme”, destacó. Y agregó: “Reconozco en él un creador de ideas, con una visión de lo que es la política y de lo que deberían ser las cosas más importantes que tiene que abordar un gobierno”.
En ese sentido, el exministro de Salud del mismo modo remarcó “la mirada integral de una sociedad que no solo necesita de una dirigencia política sino una dirigencia social, empresarial, gremial. Con cada uno de esos sectores él ha tenido una palabra de reflexión. Fue una persona absolutamente íntegra y con una capacidad de trabajo que lo hace una de las personas imprescindibles”.
En materia de salud, el exfuncionario enfatizó lo hecho por la gestión de Lifschitz al respecto. “Se terminaron los hospitales, los centros de salud, pero además hubo un compromiso grande de Miguel por la gestión. Una mirada muy atenta de cómo se utilizan los recursos, cómo los recursos que tenemos se hacen rendir lo máximo posible. Era una persona que pedía precisiones en cada una de las decisiones que se tomaban y que obligaba a estudiar al mínimo detalle”, ponderó.