Lo manifestó Jaquelina Balangione al alentar un órgano “fuerte”. Además, se mostró a favor de la reforma judicial en tanto es “una deuda de la democracia” y planteó la situación de la población carcelaria a raíz de la pandemia.
“La reforma judicial a nivel federal es una deuda que tiene la democracia argentina. La puja política era esperable. Sabemos que un juez de Comodoro Py tiene más poder que la suma del poder en el Estado”. De esa forma, Jaquelina Balangione se refirió a la mentada reforma judicial que impulsa el gobierno encabezado por Alberto Fernández. En contacto con Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario), la defensora General de la provincia se mostró a favor de la iniciativa oficial en relación con el área de la justicia penal.
En tal sentido, analizó que Argentina “tiene una disparidad absoluta en cuanto a los sistemas”. Por lo tanto, “la posibilidad de aplicar un sistema acusatorio, que ya es ley, cambia radicalmente la práctica, la mirada y el paradigma. Va a llevar tiempo, pero la República Argentina tiene que dar ese paso”, destacó.
Del mismo modo, Balangione celebró el “aumento de jueces” en tanto “da mayores garantías”. No obstante, marcó que “el proyecto oficial no contempla en igual medida la creación de más cargos de defensores. Si a nivel federal se va a implementar un sistema acusatorio, (esto) no se puede pensar si no se garantiza la paridad de armas. Tiene que haber un equilibrio para que el sistema pueda funcionar”, argumentó.
En esa línea, la funcionaria se expresó en torno a la problemática que afecta al Ministerio Público de la Acusación (MPA), en virtud de los casos de corrupción que involucran a fiscales del sur provincial. “Somos un espejo en la ley. Muchas veces, lo que pasa en uno de los organismos arrastra a otro”, en demanda de “un juzgamiento equilibrado” para los defensores públicos.
“Si pensamos que la Defensa Pública es un organismo con la suficiente independencia y autonomía que le permita ser fuerte institucionalmente, sirve inclusive para el control del trabajo de los fiscales”, subrayó en función de la opinión que merecen hechos de corrupción en el sistema judicial.
Por otra parte, Balangione ofreció un diagnóstico sobre la situación carcelaria en la provincia en el contexto de la pandemia. “Al día de hoy, los más postergados de todos en el Distanciamiento Social siguen siendo los internos que siguen sin visitas y sin salidas transitorias. Por lo cual, planteamos amparos colectivos y correctivos”, aseveró y, al mismo tiempo, manifestó su preocupación por casos de “violencia institucional y dentro de las mismas cárceles”.