No recibieron ninguna ayuda del Estado Nacional. La facturación de marzo y abril es $0. Hay una situación de tensión e insostenible con los empleados.
Las empresas de Turismo y de Transporte dedicadas exclusivamente al turismo, se encuentran atravesando la mayor crisis económica y financiera que les haya tocado.
Se trata de empresas que se vieron imposibilitadas de continuar su trabajo con motivo de las disposiciones del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, en el marco de la Pandemia del COVID-19. Esto se tradujo en la inexistencia total de ingresos desde el mes de marzo de este año.
Desde el sector se pretende visibilizar el problema de que el Estado Nacional no está asistiendo a las empresas, como dijo que iba a hacerlo.
Mónica Grosso de la firma «Turismo San Carlos», explicó en una charla con el programa televisivo Apto para Todo Público que «estamos pasando una situación que en ningún momento pensamos estar, tenemos 28 años de trayectoria, y jamás pedimos la ayuda del estado en ningún momento».
Por su parte, Soledad Bustamante dijo que «hicimos todo lo que nos pidieron, en los ATP estamos todos incluidos, muy pocos están rechazados», pero sin embargo, la asistencia no llega.
La situación de parálisis viene desde el 14 de marzo y seguramente el rubro será uno de los últimos en volver al circuito comercial, con muchos protocolos por adoptar.
«Cuando surgió la pandemia, el gobierno dijo que nos iba a dar una mano, pero se olvidó porque no estamos agrupados en el ministerio de Turismo, sino en el de Transporte, pero ni el gremio que nuclea a nuestros empleados ni ellos están haciendo algo por nosotros», explicó Grosso.
Por su lado, Bustamante sostuvo que «nuestra facturación es cero, se cancelaron todos los viajes, las reservas que teníamos para este años no están, la gente no realizó los pagos, nos genera una situación horrible e incómoda con los empleados».
«Desde 2017 venimos con una postergación para nuestra actividad y todo se desencadenó con el aumento del dólar, siempre puntualizamos en mantener las fuentes laborales con los beneficios, este momento nos encuentra sin espalda, sin dinero», argumentó Grosso.
«No quiero hacer futurología, porque me imagino un escenario utópico y apocalíptico, estamos siguiendo noticias en el mundo, estamos en una empresa que viaja permanentemente a Estados Unidos, que empezó a abrir su economía, y calculo que a fines de junio estarán abriendo los parques temáticos, eso sería una bocanada de aire fresco, en Argentina venimos con tiempos más lentos», afirmó Bustamante.
«Con mucho sacrificio, a los empleados le dimos lo que pudimos, y los aportes los pagamos completos, pero las empresas de larga no hicieron lo mismo», finalizó Grosso.
Mientras que Bustamante anticipó que para la vuelta de la actividad «uno de los protocolos es de reducir la cantidad de pasajeros, hay que tener cuidado con esto porque nos va a aumentar los costos, bastante mal saldremos de esta situación para que se dupliquen los valores».
