El diputado provincial se manifestó acerca de la emergencia alimentaria a instancias de la “catástrofe que deja Macri”. También analizó la problemática de la seguridad y afirmó que “la policía es parte del problema y no de la solución”. Con relación a las PASO, opinó que es necesario modificar el sistema electoral.
“Es una catástrofe lo que deja (Mauricio) Macri. La emergencia alimentaria viene porque hay muchos sectores que tienen hambre. Los índices del Indec dan un crecimiento alarmante de pobreza e indigencia”. De esa forma, el diputado provincial Rubén Giustiniani se pronunció acerca de la situación social que atraviesa el país en consonancia con la crisis económica. En diálogo con Ciudadanos (que se emite este domingo a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario), cargó las tintas contra los “niveles exorbitantes de inflación, del 55% anual, que se traslada a precios. Es una canasta alimentaria que queda fuera del alcance de los jubilados y de los pensionados. Ante la tragedia social, es fundamental prestar atención desde el Estado con medidas muy concretas”.
De esa forma, ponderó que el Senado de la Nación haya sancionado la Ley de Emergencia Alimentaria a los efectos de “reasignar partidas en el presupuesto nacional”. “Nuestra responsabilidad, como legisladores de la provincia, es también acudir a los sectores más vulnerables”, indicó y aludió a la presentación de un proyecto de ley que plantea llevar la Tarjeta Única de Ciudadanía de 300 pesos a tres mil pesos.
Con relación a la actividad de las pymes, también se propuso la exención a los Ingresos Brutos de agosto a diciembre, una moratoria del Inmobiliario Rural y Urbano para pequeños contribuyentes y el apoyo “a los sectores del trabajo que defienden la cláusula gatillo y un bono por única vez del salto devaluatorio que se trasladó a precios”.
El referente de Igualdad y Participación expresó, a propósito, que “es materia de la transición, en consenso del gobernador saliente, Miguel Lifschitz, con el entrante, Omar Perotti, deben sentarse porque el hambre no espera hasta el 10 de diciembre”.
A propósito y en virtud de la realidad que se avecina tras el 27 de octubre, Giustiniani marcó diferencias con lo sucedido en 2001. “Es distinto porque en el 2001 no había Asignación Universal por Hijo, dato no menor”, planteó. Y agregó: “Lo fundamental es la calle, recorremos el país y la provincia y cuando la gente baja el pulgar, baja el pulgar. Estamos en una situación de fin de ciclo, de cuatro años, que ha sido un fracaso. El resultado sí, está puesto. Pero es la sociedad la que tiene el voto”.
Con relación a las elecciones PASO y el lapso que media hasta la concreción del asunción del mandato, Giustiniani se mostró en contra tal como lo expuso en la Cámara alta de la Nación en su rol de senador. “No puede ser obligatoria para las fuerzas políticas que tienen candidatura única. En definitiva es una encuesta cara la que estamos pagando”, esgrimió al mismo tiempo que objetó que la ciudadanía deba votar los/as candidatos/as de las fuerzas políticas. Por lo expuesto, el diputado alentó una modificación del sistema electoral en cuestión.
A nivel provincial, fue consultado por la posibilidad de reformar la Constitución de aquí al 10 de diciembre próximo. “Siempre hay tiempo. Estamos atrasados. Ojalá lo hubiéramos hecho hace dos o cinco años atrás. Estoy a favor de que se haga. Saquemos el fantasma de la reelección”, consideró aunque evaluó como dificultoso que se concrete en los meses venideros.
Otra cuestión que mereció la consideración del legislador se centró en la inseguridad. “La seguridad en la provincia está en la cabeza del gobernador y del ministro de Seguridad. Y uno de los problemas centrales es que la policía es parte del problema y no parte de la solución. Ninguno de nosotros nos podemos hacer los distraídos –recalcó–. La Legislatura tiene que sancionar leyes y la Justicia no puede ser tan laxa. Pero, claramente, la principal responsabilidad es del gobierno provincial y de la policía”, adujo y apuntó a la necesidad de fortalecer la prevención.