Lo expresó Lucila De Ponti, legisladora nacional y precandidata a diputada provincial por un sector del PJ, en alusión a la gestión del Frente Progresista. Consideró que las gestiones de estos 12 años han fracasado en materia de seguridad.
En su paso por ATP, Lucila De Ponti remarcó el valor de sostener el trabajo territorial en el ejercicio político. La actual diputada nacional y precandidata a ocupar una banca en la Cámara baja provincia (por Juntos – Llegó la Hora), planteó como necesario que “la política no se defina solo en Buenos Aires”.
“Sobre todo, las personas que representamos una nueva generación de la política santafesina estemos acá, discutiendo lo que hay que hacer en la provincia de Santa Fe para que tengamos más derechos y seamos una provincia más igualitaria”, expuso la legisladora.
Asimismo, remarcó que en su rol de opositora al gobierno de Mauricio Macri en el Congreso debió “resistir” muchas de las medidas de gestión. “Quizás no tuvimos tanto éxito de poner un límite a determinadas políticas como fue el debate por el endeudamiento, la reforma jubilatoria, la reforma impositiva, los distintos presupuestos que se votaron en estos años, la reparación histórica”, enumeró, entre otros tópicos.
En ese orden, no dejó de subrayar los reclamos de los feminismos y las cuestiones de género que también tuvieron su eco en el Parlamento. “Hubo debates que nunca se habían dado, como el de la legalización del aborto, y proyectos que terminaron siendo leyes como la paridad y la Ley Micaela”, indicó.
Ante la consulta sobre su postura ante el eventual triunfo del Frente Progresista en la provincia, De Ponti expresó su confianza en que el peronismo vuelva a retomar el gobierno y, en tal caso, con Omar Perotti a la cabeza sería parte del oficialismo. “Le cambiaría un montón de cosas a la gestión del socialismo. Está por cumplir 12 años, con una pérdida de ideas y de fuerzas muy grande para asumir la agenda de demandas que tiene la sociedad santafesina. Hay una fuerte desigualdad estructural –opinó– que atraviesa de norte a sur el territorio santafesino”, manifestó y apuntó directamente como “una gestión fracasada” en torno al problemática de la seguridad.
“No solo no lo pudieron resolver, sino que el socialismo es parte del problema. Santa Fe y Rosario están entre las cinco ciudades con mayores índices de homicidios. Son ciudades en las que los vecinos han perdido la calidad de vida por la inseguridad. Es un problema muy grave que no se puede seguir metiendo debajo de la alfombra”, argumentó la diputada.