En diálogo con ATP, Cristian Cunha, coordinador del programa Objetivo Dengue, compartió los avances y desafíos de esta iniciativa que busca anticiparse a la llegada del mosquito Aedes aegypti, principal transmisor del dengue. Con un enfoque integral que involucra a diversos sectores de la sociedad, el gobierno de Santa Fe ha lanzado una campaña que, según el funcionario, comenzó a planificarse en abril de este año y se puso en marcha formalmente en agosto, cuando las temperaturas aún eran bajas, algo que demuestra la necesidad de actuar con antelación.
Detección temprana y respuesta rápida
Cunha comentó que se ha logrado detectar la presencia del mosquito en diez ciudades clave de la provincia, incluyendo Santa Fe, Rosario y San Lorenzo. «Hace 10 días detectamos que el vector está presente», afirmó, explicando que uno de los objetivos principales del programa era adelantarse a la aparición de casos. “El dengue ya no es solo una preocupación del norte del país, ahora está en muchas partes de la provincia y del país”, señaló, subrayando la gravedad de la situación.
El programa incluye una inversión de más de 8000 millones de pesos, abarcando cinco ministerios que trabajan de manera interdisciplinaria. «Estamos trabajando territorialmente con las escuelas, enseñando a los chicos sobre la importancia del descacharrado y la prevención, porque son un vehículo clave para cambiar hábitos en sus hogares», explicó.
Vacunación y prevención: un esfuerzo conjunto
Una de las medidas clave del plan es la vacunación, que comenzó priorizando a bomberos, policías y personal de salud, así como a jóvenes de 15 a 19 años, debido a que esta franja etaria ha sido una de las más afectadas por el dengue en años anteriores. Aunque la vacunación avanza bien en los primeros grupos, el coordinador del programa reconoció que hay ciertos desafíos con los adolescentes: «Es difícil que ellos vayan voluntariamente a un centro de salud, pero estamos ajustando estrategias para motivar su participación».
El plan de vacunación es parte de una estrategia nacional y a largo plazo, y Cunha destacó que Santa Fe fue la provincia que más invirtió en la compra de vacunas, superando incluso a la Nación. “El mosquito no tiene fronteras, por lo que debemos actuar de manera coordinada para frenar la propagación”, afirmó.
La importancia de la conciencia ciudadana
El éxito de la lucha contra el dengue no depende únicamente de las acciones del gobierno. El entrevistado enfatizó la importancia de la participación ciudadana, especialmente en la prevención a nivel doméstico: «El mosquito pone sus huevos en recipientes con agua estancada, como baldes, floreros o el agua de las mascotas. Es crucial revisar nuestros patios, eliminar estos criaderos y utilizar repelente”.
Además, resaltó que la fumigación no es la única solución. “Fumigamos cuando se detecta un caso, pero lo más importante es la prevención en los hogares”, explicó. Para apoyar a las familias, el gobierno también está distribuyendo repelente a gran escala, con una producción proyectada de más de 500.000 frascos.
Un llamado a la responsabilidad
Finalmente, Cunha hizo un llamado a la responsabilidad individual. «Si te tocan el timbre y te dicen que vienen a fumigar, abrí la puerta», instó, destacando que las cuadrillas estarán debidamente identificadas. “No podemos comprar conciencia, eso depende de cada uno. Si no trabajamos en conjunto, será difícil frenar esta enfermedad”, concluyó.
El programa Objetivo Dengue continúa en alerta, con la maquinaria y los insumos distribuidos estratégicamente en seis regiones de la provincia. La batalla contra el dengue es un esfuerzo conjunto entre el gobierno, las comunidades y los ciudadanos, con el objetivo de reducir los casos y evitar más muertes.
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