El senador nacional Marcelo Lewandowski participó de la sesión en la Cámara Alta donde se debatió la Ley de Bases, impulsada por el Gobierno nacional. Durante su discurso aseguró: «Voy a votar en contra de la Ley. Yo no estoy para frenar nada. Lo que necesitamos es resolver los graves problemas de Argentina, pero esta Ley Bases no es el camino» .
En ese sentido sostuvo: «Es cierto que nos debemos una Ley Bases y nos debemos políticas de Estado que perduren en el tiempo. Que haya previsibilidad, pero no solamente para los que quieran venir a invertir; previsibilidad para los que vivimos en Argentina y no solamente en cuestiones económicas, sino que también para la educación, para la salud, para el medio ambiente».
«Una de las tantas frases que hemos escuchado fue que ‘hay que darle las herramientas al Presidente’. A mí me encantaría darle herramientas efectivas. Ahora, lo que le estamos dando, a como están gobernando, es como una masa y un cortafierro para seguir rompiendo«, para alguien que «como él mismo lo dijo, vino a destruir el Estado», remarcó.
Además recordó las presentaciones de «aquellos integrantes del INTI, del INTA, del CONICET, que venían a expresarse en estos días para que no sean desmantelados esos organismos» y pensaba que «deberían ellos estar redactando la Ley, porque son los que tienen la capacidad y conocimientos necesarios, porque saben de qué se trata el desarrollo de nuestra Argentina”. “No solamente necesitamos capitales, sino también cerebros y brazos. Y esos cerebros hoy están pidiendo que no les desguacen esos organismos que son tan importantes en cualquier desarrollo de un país que se precie, con crecimiento y con desarrollo«, subrayó.
Sobre la industria y específicamente sobre el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), el senador citó el ejemplo de Santa Fe -que integra la Región Centro con el centro norte de Buenos Aires, Córdoba y Entre Ríos-: “Concentramos el 44 por ciento de las fábricas de maquinaria agrícola y el 22 por ciento de las exportaciones nacionales”. “Tenemos 6 mil pequeñas, medianas y grandes empresas; 140 mil trabajadores directos y 350 mil trabajadores de forma indirecta a esas empresas. ¿Y sabe qué ha pasado en estos seis meses? El 18,8 por ciento de retracción interanual en la industria, en la rama de manufactura. Las exportaciones a Brasil disminuyeron un 35 por ciento. ¿Sabe por qué? Porque fundamentalmente las manufacturas cayeron en ese nivel y crecieron aquellos destinos que demandan materia prima como en el caso de India. En el rubro electrodomésticos y la línea blanca, freezers y heladeras se bajaron los aranceles de importación. ¿Y qué está pasando con esas fábricas? Están suspendiendo y echando gente. Este modelo ya está funcionando así como lo quieren. De los empresarios de distintas cámaras vinieron aquí a exponer no hubo uno que no planteara los cambios y los inconvenientes que el RIGI iba a traer a esas empresas».
«Nosotros tenemos en la región de Las Parejas, de Armstrong, de Las Rosas, el núcleo de maquinarias agrícolas. Si mañana viene una empresa, se instala allí con el RIGI, automáticamente pasa a competir con muchas ventajas frente a aquellas que hace 50, 60 años están instaladas dándole mano de obra a la gente. Le pegamos y las hundimos”, aseguró.
Sosteniendo su postura frente a la iniciativa, el senador nacional expresó: «¿Queremos que vengan inversiones?, ¡Cómo no vamos a querer! ¿Queremos que se exploten los minerales? Pero por supuesto. ¿Queremos que se explote el gas? Claro que sí. Queremos que vengan a invertir pero en igualdad de condiciones. Nosotros tenemos una de las reservas gasíferas más importantes. Quedó a medio terminar el gasoducto que va a cruzar por mi provincia y va a ir al norte para exportar a Brasil. ¿Hay que exportar? Claro que hay que exportar. Pero tenemos una ventaja enorme para pensar que ese gas sirva a nuestra matriz de desarrollo industrial y también para que nuestra gente pueda consumir gas a un precio más acorde”, planteó. “¿O estamos pensando solamente en el extractivismo, que se lo lleven y punto? ¿Pero cómo no vamos a querer el desarrollo de Argentina? ¿Pero cómo no vamos a querer que traigan los dólares? Que los traigan, pero en el nivel que tenemos y estamos exponiendo, solamente hay dos países en el mundo con ventajas tan fabulosas para los que vienen a extraer, Angola y Nigeria. Ni siquiera los modelos chilenos y peruanos que nos ponen como ejemplo dan tantas ventajas como lo tenemos nosotros», señaló.
Lewandowski también fue crítico en materia de política exterior y manifestó: «Está la famosa frase de que debemos entrar al mundo, de que el mundo no nos ve o no nos considera. En materia de política exterior nos peleamos con Brasil, socio y vecino estratégico. Estábamos a punto de ingresar a los BRICS, la mesa donde están las economías que más están creciendo en el mundo, economías emergentes. Por ejemplo India, que es un gran inversor de una de las empresas más importantes que tiene Santa Fe, Acindar. Nos quedamos afuera, decidimos salir porque no nos interesa sentarnos a esa mesa que podría servir. No es lo mismo estar sentados para intercambiar relaciones comerciales que golpear la puerta para ver cuándo nos dejan entrar. Nos peleamos con China. Queremos exportar a la Unión Europea, pero dicen que no estamos con el cambio climático, que el acuerdo de París no es importante», criticó.
Por último recordó el debate en el Senado del tratado Roca – Runciman, en donde el entonces senador por Santa Fe, Don Lisandro De la Torre, investigó y denunció aquel acuerdo que favorecía a los grandes capitales del mundo en detrimento de la Nación. “Por supuesto que no es la carne y no son los frigoríficos, pero no pensemos que la llegada de dólares nos tiene que impedir ver el desarrollo integral y entregar el desarrollo de nuestras Pymes, que son las que mayor desarrollo de mano de obra necesitan, a los designios extranjeros para que tengamos un desarrollo que solamente le sirva a una porción muy pequeña de la población”, remarcó.