Se trata del traumatólogo Sebastián Solano Seelin, quien atendiera al joven Maximiliano Iñiguez en la clínica Los Alerces, en 2014. El joven falleció tras contraer una infección generalizada.
Se llevó a cabo el primer juicio oral y público, en la ciudad de Rosario, contra un médico que se desempeñaba en la clínica Los Alerces. Hasta allí había llegado un joven de 21 años, Maximiliano Iñiguez, al padecer fractura de tibia y peroné tras sufrir un accidente de tránsito. Esto ocurrió en 2014.
Si bien el muchacho fue atendido por esa dolencia e intervenido quirúrgicamente, contrajo una infección generalizada que le provocó la muerte. Por este motivo, se inició una investigación judicial y se determinó que el profesional que procedió en la ocasión había tomado una decisión perjudicial.
La querella había solicitado cinco años de prisión y cinco años de inhabilitación, en tanto la fiscalía había solicitado tres años de prisión en suspenso y cinco de inhabilitación. Finalmente, se hizo lugar a lo planteado por la fiscalía sobre Sebastián Solano Seelin, el traumatólogo en cuestión.
Se trata de la primera condena en la provincia en primera instancia por mala praxis médica.