Según lo dispuesto en el orden de mérito elaborado luego de los respectivos concursos, los y las agentes desempeñarán sus funciones en las sedes de Santa Fe y Esperanza.
En un acto celebrado este viernes en el Consejo Superior, se concretó el ingreso de 51 agentes a la planta de personal no docente de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), según lo dispuesto en el orden de mérito elaborado luego de los respectivos concursos. Por segundo año consecutivo, en este 2019, se produjo el ingreso de una persona con discapacidad que se incorpora a trabajar en la administración de la Universidad.
Con fuerte presencia femenina (37 mujeres y 14 varones), los 51 trabajadores rubricaron el contrato y recibieron la carpeta que inicia su legajo, en un acto encabezado por el rector de la UNL, Enrique Mammarella, el secretario General, Adrián Bolatti, y el secretario General de APUL, Rubén Núñez.
Mammarella recibió con una cálida bienvenida a los nuevos agentes y recordó que el acceso es producto del mérito propio, como así también, del esfuerzo de todos los argentinos. A su vez, señaló que la realización de concursos son un derecho que tenemos como ciudadanos, pero también una gran responsabilidad: “Ahora nos toca a todos demostrar que estas decisiones son para mejorar la universidad, hacer más y mejor educación pública”.
A su turno, Nuñez, en representación de APUL, valoró “es un trabajo de prestigio, que garantiza estabilidad, movilidad, formación permanente, y sobre todo, calidad en una renombrada institución”. También destacó que estos empleos “demuestran el esfuerzo presupuestario para poder permitir duplicar los ingresos de las vacantes, en los que hoy 51 familias se verán beneficiadas”, y alentó a los nuevos agentes a desempeñarse con compromiso y responsabilidad a la función pública.
En el acto, estuvieron presentes el exrector de la Universidad y director del Plan Maestro de Infraestructura, Miguel Irigoyen, decanos de las Facultades de Ingeniería y Ciencias Hídricas, Raúl Pedraza; de Ciencias Médicas, Larisa Carrera; de Ingeniería Química, Adrián Bonivardi, de Humanidades y Ciencias Laura Tarabella; secretarios y autoridades universitarias, docentes, personal no docente y estudiantes.
La inclusión laboral como eje transversal
En el marco de la política de inclusión laboral de la UNL, ingresó María Andrea Comini, del escalafón administrativo. El proceso fue facilitado por el trabajo articulado con el Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación, a través del Programa de Inserción Laboral- PIL, orientado a la inserción de trabajadores desocupados con mayores dificultades de empleabilidad.
La directora de la Regional Centro del Ministerio de Producción y Trabajo de la Nación, María Verónica Solmi, manifestó que la UNL fue una de las primeras universidades del país en apostar a este programa que brinda múltiples herramientas. “Se trata de herramientas financieras, procurando brindar asistencia económica para que la persona pueda prestar una actividad -en principio por cuatro horas diarias-, y una vez concretado el PIL, se continúa con el financiamiento en parte del salario obteniendo de este modo un contrato formal de trabajo”.
Por su parte, Javier Fernández, quien está a cargo de la Agencia Territorial del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación, remarcó que “trabajamos coordinadamente con todos los municipios, fundamentalmente los ubicados en el centro norte de la provincia, porque entendemos que son los lugares donde las personas deben referenciarse para su formación y mejorar su empleabilidad. Por ello, llevamos políticas de Estado a los gobiernos locales para que los jóvenes tengan una oportunidad de empleo”.
Funciones y cargos
Los nuevos agentes desempeñarán sus funciones en Santa Fe y Esperanza. Son 30 los que se incorporarán a la administración de la universidad, dos como bibliotecarios, 10 a servicios generales y tres a seguridad y vigilancia. Mientras que en Esperanza, se desempeñarán dos en funciones administrativas y cuatro en servicios generales.
