Se trata del Programa de Fortalecimiento de la Autonomía Progresiva, perteneciente a la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia que comprende a unos 140 jóvenes sin familia en su transición hacia la vida adulta.
El gobierno de la provincia de Santa Fe, a través de la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, lleva adelante desde hace más de un año, el Programa de Fortalecimiento de la Autonomía Progresiva cuya tarea es acompañar a jóvenes que, por situaciones de vulneración de derechos, han sido separados de su grupo familiar definitivamente y que por diversos motivos no ingresan al proceso adoptivo.
En los adolescentes de 13 a 18 años alojados en centros residenciales, se realiza un abordaje multidimensional que apunta principalmente a trabajar sobre los vínculos afectivos y la educación. En tanto, a los jóvenes de entre 18 y 21/25 años, se los contiene y apoya haciendo hincapié en la vivienda y el trabajo.
Dentro del programa, que se encuentra en expansión y reestructuración constante debido a la coyuntura, se han comenzado a implementar las denominadas “casas de pre-egreso” o “pisos asistidos”, como modalidad intermedia entre un centro residencial y una residencia totalmente autónoma.
En la ciudad de Santa Fe existe desde agosto de este año una casa asistida o de pre-egreso, en la zona centro, que se encuentra en convenio con Fundación Ángel. La misma cuenta con cinco plazas y se trabaja en los proyectos para abrir una nueva casa el próximo año.
La coordinadora del Programa de Fortalecimiento de la Autonomía Progresiva, Sofía Araujo, explicó que “este nuevo modelo de acompañamiento se piensa como un modo de invitar a los jóvenes a que extiendan sus proyectos de vida en la ciudad y fuera de ella. El principal trabajo será generar los recursos necesarios para habilitar la mayor cantidad de opciones posibles”.
“El programa es innovador ya que convoca a un trabajo conjunto a todas las reparticiones del Estado provincial y municipal, en un compromiso de corresponsabilidad como único modo de hacer posible el acompañamiento de esta población joven que debe ser priorizada”, concluyó.
El programa
Es una experiencia innovadora en el país que solo cuenta con experiencias en marcha en la provincia de Santa Fe. Por tal motivo, presenta diferentes aristas que hacen necesaria la participación de los diversos actores del Estado y de la sociedad civil que contribuyan a consolidar una red para contener a esta población joven.
Para ello se conformó la Comisión de Autonomía, en la que participan equipo técnicos de la subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia junto con referentes de centros residenciales y de los ministerios y reparticiones de los estados provincial y municipal.
En primera persona
Simone, una joven rosarina que se alojaba en “Casa Puente”, un centro residencial de la ciudad de Rosario, contaba su experiencia hace un año: “Estoy haciendo un curso de cuidados de adultos y enfocada en repartir currículms para conseguir un trabajo porque más allá de lo difícil que se haga, tenés que seguir. En algún momento tenés que salir y hacer tu vida normal”.
Hoy, Simone vive en una residencia particular y forma parte de un espacio laboral en el geriátrico provincial de calle Ayolas, en Rosario, en el marco del programa Nexo Oportunidad. La joven transita el proceso de egreso del Sistema de Protección, un paso definitivo e irreversible en la biografía hacia la vida adulta para los jóvenes sin cuidados parentales que debido a la inexistencia de un grupo familiar que los contenga, precisan del acompañamiento estatal.
Pionera
Santa Fe es una de las pocas provincias en todo el país que, en el marco de la denominada “Programa de Acompañamiento para el egreso de jóvenes sin cuidados parentales” (Ley Nacional N° 27.634) lleva adelante diferentes estrategias para abordar integralmente la situación en la que se encuentran estos jóvenes.
Además, se dispone de un equipo específicamente designado con funciones establecidas para atender cada caso y realizar un seguimiento.
La Ley, cuya implementación hizo necesaria la formación de un Consejo Federal, dispone que el Estado debe realizar acompañamiento hasta los 21 años de edad mediante dos recursos principales: una asignación económica y una persona destinada a acompañar dicho proceso.