El diputado nacional por Santa Fe, Esteban Paulón, criticó duramente el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario, destacando el impacto simbólico y político de la medida, más allá de sus consecuencias económicas.

En una entrevista con el programa ABC1, el diputado nacional por Santa Fe (Encuentro Federal), Esteban Paulón, expresó su preocupación y malestar por el veto presidencial a la ley de financiamiento universitario, una decisión que calificó como «un ataque a uno de los pilares fundamentales de la educación pública en Argentina». Paulón destacó que el veto no solo afecta el presupuesto universitario, sino que también refleja una postura ideológica del presidente hacia lo público.

“El presidente menosprecia lo que funciona en el país, y la universidad pública es un claro ejemplo de eso”, comentó. Asimismo, subrayó que más del 80% de la sociedad argentina tiene una visión positiva de las universidades, valorando su papel en la movilidad social y el desarrollo del país. El diputado enfatizó que este veto es «más simbólico que económico», ya que la gestión ha demostrado que recursos existen, pero hay una decisión ideológica detrás.

Durante la charla, el legislador recordó que de las universidades públicas argentinas han salido cinco premios Nobel, un dato que resalta la importancia y el prestigio de estas instituciones a nivel mundial. Sin embargo, criticó que, en vez de fortalecerlas, el gobierno actual elige debilitarlas. Según el entrevistado, la administración está más preocupada en consolidar una minoría fanática que en construir consensos políticos para mejorar el sistema educativo.

Paulón también se refirió al próximo debate del presupuesto, donde su bloque Encuentro Federal buscará garantizar que las universidades no sufran más recortes. Advirtió que, si el gobierno no está dispuesto a abrir el diálogo, presentarán una propuesta propia para asegurar que la educación y las jubilaciones no sean las víctimas del ajuste fiscal.

Finalmente, el diputado lamentó que temas como la marcha del orgullo en Rosario quedaran en segundo plano ante la gravedad de la situación con el financiamiento universitario. Sin embargo, destacó que estas movilizaciones seguirán siendo una expresión de lucha y democracia en un contexto donde los discursos de odio intentan ganar terreno.

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