En una entrevista reciente con Franco Bartolacci, rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), se profundizó sobre el conflicto generado por el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario, una medida que buscaba asegurar los recursos económicos necesarios para las universidades públicas del país. Bartolacci expresó su preocupación por la decisión del gobierno y la injusticia que implica para las instituciones educativas y científicas del país.

El rector no dudó en criticar las declaraciones del presidente de la Nación, quien cuestionó la proporción de empleados por estudiante en la UNR a través de un posteo en redes sociales. Bartolacci respondió enfáticamente, subrayando que el comentario del mandatario «intenta generar sospechas para desprestigiar a la universidad pública». Además, señaló que la cifra utilizada en el mensaje presidencial era incorrecta y sólo contaba una parte de la realidad.

«Lo que el presidente ignora es que la universidad es mucho más que sus estudiantes de grado. Tenemos siete escuelas preuniversitarias, una escuela de oficios, programas para adultos mayores, institutos de investigación y comedores universitarios, entre otros. La UNR es una institución compleja y diversa, que va más allá de los números simples», explicó Bartolacci.

Un ataque a la universidad pública

Bartolacci fue categórico al calificar el veto como un intento de defunding (desfinanciamiento) de la universidad pública. Según el rector, esta estrategia busca socavar la legitimidad de una institución clave para la igualdad de oportunidades en el país. «Este tipo de decisiones ponen en riesgo el derecho de las futuras generaciones a acceder a una educación de calidad», añadió.

El rector destacó que el esfuerzo de las comunidades universitarias y científicas para sostener el sistema educativo es inmenso, y las decisiones del gobierno nacional son profundamente injustas frente a ese trabajo. «La universidad pública es una de las pocas instituciones que aún preservan la intimidad social en Argentina, y en lugar de fortalecerla, lo que hacemos es socavarla», afirmó.

La esperanza en la discusión presupuestaria

A pesar de la frustración por el veto, mostró optimismo respecto a la discusión del presupuesto 2024, que podría ser una nueva oportunidad para defender el financiamiento de las universidades. «El compromiso de 160 diputados que apoyaron la ley es un buen punto de partida para la próxima discusión presupuestaria. Es un avance, pero todavía hay mucho trabajo por hacer», comentó.

El rector subrayó la importancia de mantener la movilización y la unidad dentro del sistema universitario, destacando que las manifestaciones y las discusiones públicas han logrado resultados importantes, aunque aún insuficientes. «La votación en el Congreso fue un paso hacia adelante, pero debemos seguir luchando para revertir este escenario en la discusión del presupuesto», concluyó.

Un llamado a la defensa de la educación pública

La entrevista también abordó la reacción de Bartolacci frente a los legisladores que votaron en contra de la ley, muchos de los cuales se formaron o trabajan en universidades públicas. «Es inexplicable que alguien que se benefició del sistema educativo público, y que incluso enseña en él, vote en contra de su financiamiento. No logran comprender la gravedad del problema», sentenció.

Para el rector, es esencial que la sociedad en su conjunto entienda que la defensa de la universidad pública no solo beneficia a las comunidades académicas, sino que es un pilar fundamental para el desarrollo del país. La universidad pública, según el rector, debe ser fortalecida con inversiones inteligentes y una visión de largo plazo.

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