Estuvo en el programa Ciudadanos, Cristian Hoffmann, secretario ejecutivo del Ente Coordinador del Área Metropolitana de Santa Fe, con quien abordamos temas clave sobre la política actual, la transformación que está viviendo la provincia y los desafíos en la gestión del área metropolitana. Hoffmann, nos compartió su visión sobre el cambio de época que muchos perciben con la llegada de nuevas figuras como Javier Milei y la gestión de Maximiliano Pullaro en la gobernación de Santa Fe.
La política como forma de vida
Desde sus primeros pasos en la política, Hoffmann ha defendido la idea de que la política es «una forma de vida». Para él, su rol como dirigente no es un trabajo, sino una vocación que ha asumido con gran responsabilidad. En este sentido, destacó su pertenencia al espacio Encuentro Republicano Federal, liderado a nivel nacional por Miguel Ángel Pichetto, y cómo este sector ha logrado posicionarse como una alternativa seria y comprometida.
«Me considero un político profesional», afirmó Hoffmann, en sintonía con la frase de Pichetto, subrayando el respeto que siempre ha tenido por la política. Este compromiso, explicó, es lo que ha impulsado las grandes transformaciones que ha vivido la provincia en los últimos años, con especial mención a la reciente elección de Pullaro como gobernador.
Un nuevo escenario político en Santa Fe
Hoffmann señaló que el actual gobernador Pullaro, oriundo de un pequeño pueblo del sur santafesino, ha demostrado que las transformaciones pueden lograrse desde la política, con cercanía y compromiso con el territorio. El respaldo de más de 1,1 millones de votos a Pullaro fue, según Hoffmann, una clara señal de confianza en este proyecto.
En paralelo, destacó la gestión del actual intendente de Santa Fe, Juan Pablo Poletti, a quien describió como un «outsider» que decidió involucrarse en la política tras su experiencia durante la pandemia. Esta entrada de figuras disruptivas, tanto en el ámbito nacional con Milei como en lo local con Poletti, responde, según el entrevistado, a un profundo descontento con la clase política tradicional.
El área metropolitana como eje de desarrollo
Como titular del Ente Coordinador del Área Metropolitana de Santa Fe, Hoffmann está al frente de un proyecto que involucra a 27 localidades de cuatro departamentos de la provincia. El desafío, explicó, es lograr una integración territorial que permita abordar de manera conjunta los problemas que afectan a la región, como el transporte, los residuos y la conectividad.
«Estamos hablando de 800.000 santafesinos que viven en el área metropolitana», destacó, subrayando la importancia de pensar en soluciones integrales que beneficien a toda la región. En este sentido, señaló que el Ente trabaja de manera articulada con los intendentes y presidentes comunales de las localidades involucradas, así como con los legisladores provinciales, lo que permite avanzar en proyectos clave para el desarrollo de la zona.
Reforma constitucional y autonomía municipal
Uno de los temas que Hoffmann considera fundamentales para el futuro de la provincia es la posible reforma constitucional. Según explicó, esta reforma debería incluir la consagración de la visión metropolitana, no solo para Santa Fe, sino también para otras áreas metropolitanas de la provincia. Además, señaló que la autonomía municipal, un reclamo histórico de los intendentes, es compatible con esta visión.
«Una cosa no es incompatible con la otra», aseguró Hoffmann, destacando que la clave está en lograr una colaboración efectiva entre los distintos niveles de gobierno para abordar los problemas que afectan a las localidades más pequeñas y a las grandes urbes por igual.
Al cierre de la entrevista, compartió una reflexión sobre el momento actual de la política nacional y el rol de figuras como Miguel Ángel Pichetto. Para Hoffmann, Pichetto es un referente indispensable en la política argentina, no solo por su vasta experiencia, sino por su capacidad para generar consensos y garantizar la gobernabilidad en momentos de gran convulsión.
«Es una persona necesaria para la política», concluyó Hoffmann, subrayando que, en un contexto donde figuras disruptivas como Milei ganan protagonismo, es fundamental que la política recupere su sentido institucional y se aleje de los excesos que pueden poner en riesgo la democracia.
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