La ministra de Igualdad, Género y Diversidad de Santa Fe se refirió al 8M, su recorrido de militancia y las acciones para prevención de violencias machistas.
“El gran volumen de mujeres y disidencias que concurrió a la plaza sigue estando de pie. Hay reclamos todavía pendientes por parte de organizaciones, de familias y de mujeres organizadas en distintos ámbitos. Y la marcha y la calle siguen siendo grandes herramientas de reclamo”. De esa forma, la ministra de Igualdad, Género y Diversidad de Santa Fe, Florencia Marinaro, se refirió al reciente 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer, y la huella que supo imprimir con su convocatoria. En un mismo sentido, la funcionaria consideró que tal fecha es una ocasión para la reivindicación de derechos y de conquistas.
También el 8M es, en palabras de la ministra, una ocasión de encuentro bajo varias banderas como “la no violencia, la maternidad cuidada, la democratización de las tareas de cuidado, vidas libres de acoso callejero”. “Me llamó la atención de niñas y adolescentes que había (en la última marcha) y creo que les estamos dejando un mundo un poquito mejor. Se están criando con más libertad y más derechos”, remarcó Marinaro este viernes en diálogo con ATP.
La actual ministra es abogada e inició su militancia política en 2003, en las filas del incipiente kirchnerismo. Además, formó parte de la Multisectorial de Mujeres, de la Mesa Ni Una Menos, del equipo jurídico Ana María Acevedo y con Mujeres por la Paridad, entre otras actividades que tuvieron su momento clave en ser parte de la gestión de Omar Perotti y suceder en el cargo a Celia Arena. “Soy fruto o semillero de un montón de mujeres que en la política me abrieron puertas y también en el movimiento de mujeres. También con eso tiene que ver mi designación”, subrayó.
Ya en el plano de la gestión pública, Marinaro fue consultada acerca del caso de Romina (que saltó a la opinión pública justamente el último 8M en nuestra ciudad), la mujer que denunció en reiteradas oportunidades por violencia de género a su expareja, un hombre que atentó contra los vehículos de la propia víctima y de su hermana. El sujeto fue puesto en libertad. “El enorme desafío tiene que ver con dejar huella institucional en la prevención de las violencias. Lo que tenemos que transmitir como mensaje es más Estado y más políticas públicas. En el proceso de denuncias, hay revictimización de mujeres, muchas para mejorar y decisiones políticas que tienen que transformarle la vida a las mujeres”, esgrimió en torno a las responsabilidades que le caben en tanto integrante del Poder Ejecutivo.