La empresa que tiene a cargo la administración y operación del hotel emitió un comunicado explicando la situación de los contratos, la relación con UPCN y acusó al Club Colón de ser «poco claros» en la negociaciones por los contratos vigentes y de «hostigamiento y extorsión».
Días atrás explotó un conflicto entre el Club Colón y UPCN por el uso de las instalaciones del Hotel de Campo. La institución rojinegra planificó la pretemporada del equipo profesional haciendo uso de las instalaciones del Club, ya que UPCN que ocupaba por la pandemia el predio dejaría de hacerlo el 2 de enero. Finalmente eso no sucedió y se desencadenó una serie de conflictos con llamado a asamblea por parte del Club que pide el restablecimiento del Hotel «a los socios». La misma se llevará a cabo el jueves 13 a las 18.30 en el playón del Club.
La institución deportiva no solo menciona a UPCN en sus acusaciones sino que menciona a la firma Dique Dos, que está a cargo de la administración y operación del hotel. Por tal motivo desde la empresa emitieron un comunicado para aclarar su postura y contar detalles de la situación.
El marco contractual vigente
En el comunicado, Dique Dos explicó la situación contractual. «Durante este período, todos los contratos firmados por las partes fueron avalados por las diferentes comisiones directivas, como así también dirigentes de la oposición, juez y síndico del concurso de acreedores, el órgano fiduciario, etc. Las rendiciones de cuenta de la operación fueron remitidas en los tiempos acordados en forma regular y permanente.
Las obligaciones fueron claras para las partes. La empresa sería titular de unidades funcionales del hotel a cambio de remodelar lo poco existente en ese momento y construir el resto. Todas las mejoras del casco quedarían al final del proyecto para el Club, excepto las habitaciones de dicha unidad funcional que, entre otras cosas, Colón debe pagar a los inversores.
Nunca a lo largo de más de 10 años hubo, por parte de la actual Comisión Directiva ni las anteriores, ninguna objeción, comentario, discusión o cuestionamiento de ningún tipo por parte de Colón, sobre los contratos ni sobre la gestión y funcionamiento del hotel».
Falta de fundamentos y decisión de rescindir el contrato
En otra parte del comunicado, la empresa señala: «En los últimos meses, y por iniciativa del Club Colón se realizaron reuniones entre representantes de la firma y dirigentes, en las que pareció manifestarse la voluntad del club de rescindir los contratos vigentes. Sin embargo, y más allá de la voluntad de la empresa de lograr un acuerdo, el club siguió modificando las condiciones e intensificando el hostigamiento y extorsión, sin dejar en claro cuál sería la decisión final sobre el acuerdo vigente y en curso de ejecución».
«Entre otras cosas poco claras, no se entiende por qué se pretende cambiar un formato de servicios de alta calidad y sin costo para la institución, por un servicio improvisado, de dudosa calidad, sumando un nuevo costo para el club».
Dique Dos decidió enviar al club una carta documento pidiendo aclaraciones y precisiones respecto a los pasos a seguir. Destacando en la misma que, se continuaría brindando en el hotel todos los servicios acordados. Especialmente, y como sucedió en los últimos 10 años, se manifestó la entera colaboración y disposición para que el plantel superior realice la pretemporada actual, cumpliendo incluso con los protocolos sanitarios correspondientes mediante el sistema de “burbuja”.
Nunca se recibió una respuesta formal a los requerimientos legales, sólo una exposición innecesaria que violenta una relación de servicio intachable, de más de 10 años.
Finalmente, destacan que el hotel estuvo y está a disposición de los jugadores y concluyen:
«Lejos de ocasionar un problema económico o de gestión, se respetarán los compromisos asumidos, con clientes, concesionarios, personal y socios en general. El hotel en sus unidades funcionales correspondientes es del club y de sus socios, y no debe permitirse que la actuación temeraria de una Comisión Directiva, siempre circunstancial y transitoria, en una serie de actos de atropello sin respaldo jurídico alguno, afecte los más elementales intereses de toda la comunidad santafesina, y especialmente, del pueblo sabalero.
Lamentamos profundamente, no poder continuar acompañando al plantel profesional en estos tiempos donde se lograron los mayores éxitos deportivos del Club, en el cual el Hotel ha sido una pieza clave dando al plantel un servicio de excelencia e irreemplazable en la zona, habiendo puesto toda su logística al servicio del cumplimiento de los objetivos deportivos logrados, y que las ciudades de Santa Fe y Santo Tomé pierdan un eslabón clave en su desarrollo hotelero y las consecuencias que esto conlleva».
