Lo sostuvo Jaquelina Balangione, defensora General de Santa Fe, en virtud de la realidad carcelaria. Planteó que, desde la implementación del sistema acusatorio, en la provincia creció entre un 35 y un 40% la cantidad de presos.

Que se finalice de construir un penal federal en las adyacencias de Coronda y la cantidad de presos y presas federales en las cárceles, así como la superpoblación en comisarías de la provincia fueron algunos de los tópicos que repasó Jaquelina Balangione, defensora General de Santa Fe, en su paso por Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario).

“Es una vieja deuda de la Nación porque, además, no aportan ni siquiera para la comida de esos presos (federales). Además, la justicia federal pone mucho el ojo en el narcomenudeo y eso genera gran cantidad de personas privadas de libertad”, sostuvo la funcionaria. Y profundizó: “El Estado da una única respuesta a la actividad criminal, que es la cárcel. La respuesta punitiva es la cárcel o la casa. No hay un intermedio”. En ese orden, ponderó las reformas realizadas en el penal de Las Flores y las mejores condiciones para los internos en materia de derechos.

El chico que cometió un delito, que no es tan grave, que no lesionó a una persona, por ejemplo, con un hurto, sería mucho mejor que no pase por la cárcel –fundamentó la defensora–. En el mundo funciona así. Tenemos que apelar a criterios de justicia restaurativa, más resiliente, que trate de convertir lo malo en algo bueno”. Y acotó: “La cárcel, que es el castigo más severo, debería ser la última elección si el delito no es muy grave”.

De la misma manera, Balangione cuestionó el uso del proceso abreviado en el plano del sistema acusatorio. Este proceso “genera una respuesta muy rápida porque enseguida la persona obtiene la condena, eso debería disminuir el porcentaje de procesados, presos en prisión preventiva. Los fiscales piden condenas largas, muy largas. Deberían caminar las cárceles para saber dónde se cumplen las condenas. No es lo mismo 12 que 10 años en el encierro”, postuló. En tanto, acotó que “desde la implementación del sistema acusatorio, en la provincia de Santa Fe creció entre un 35 y un 40% la cantidad de presos”.

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