En estos términos, diplomáticos y conciliadores, el presidente del PJ Ricardo Olivera se refirió al debate de la ley de Necesidad Pública. También habló sobre el caso Vicentín y sobre los presos políticos.
En las últimas semanas, la política local es una fuente inagotable de temas que se pueden debatir desde diferentes aristas y hasta parece que las discusiones no tienen clausura.
La ley de Necesidad Pública, el caso Vicentín y el debate nacional acerca de los presos políticos que aún tiene el gobierno nacional fueron los ejes de una charla con Ricardo Olivera, presidente del PJ santafesino y diputado provincial.
Fue en el programa televisivo Ciudadanos que se emite los domingos a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario.
Todo preso es político
Consultado acerca del debate que se presentó en las esferas de políticas nacionales sobre los denominados “presos políticos”, en referencia a Milagro Sala, Amado Boudou y Luis D’Elía, Olivera manifestó que “lo planteé en el discurso de asunción: ‘la unidad hasta que duela’”.
El dirigente sostuvo que “la situación nos llevó a una discusión de conceptos, cuando en realidad desde el punto de vista de los contenidos, de lo formal o ideológico, en el peronismo, la mayoría coincidimos en que hubo una justicia que le hizo mucho daño a algunos dirigentes”.
Además, distinguió que “si le damos un contenido político al concepto de Justicia, sí son presos políticos porque no está bien hecho el proceso judicial, no hay garantías”.
También se refirió a que se están trazando perfiles de liderazgos de otra forma: “A Cristina la veo con una actitud diferente, está más centrada en la construcción de la unidad, me parece que el ‘albertismo’ está intentando crecer y obviamente que eso genera una fisura”.
Los sordos
En cuanto al (por ahora) eterno debate del proyecto de ley de Necesidad Pública, Olivera introdujo una mirada novedosa y hasta conciliadora: “Cuando se habló de emergencia parecería que es una acusación fuerte a la gestión anterior, creo que tuvo errores y uno puede tener diferencias, pero lo cierto es que el que está en emergencia es el país, es muy difícil negarlo a partir de lo que nos pasó en estos cuatro años en la Nación”.
Fundamentó que “a lo mejor nuestro discurso fue equivocado, pero también fue malinterpretado por el gobierno que se fue, sobre esta base, podemos decir que hay consenso para darle algunas herramientas al poder ejecutivo para superar esta emergencia”.
La mano tendida
Consultado sobre si el caso Vicentín tiene características que configuren un delito económico, Olivera sostuvo que “tiene esa sensación”.
Respecto de lo que se pueda hacer desde el gobierno provincial, indicó que el ministerio de la Producción está superinformado hablando con los actores que pueden ser perjudicados, la provincia deberá tomar algunas medidas vinculadas a políticas activas para brindarle ayuda a los productores”.