La muerte violenta del joven de 19 años, en la ciudad de Villa Gesell, sigue generando conmoción. Hay una orden de la UAR para que los presidentes de las entidades del país salgan a los medios a explicar en qué consiste el rugby. ¿Desde Santa Fe qué postura hay?
El debate que se formó en torno al cruel asesinato de Fernando Báez Sosa de 19 años en Villa Gesell a mano de rugbiers no para.
Desde diversas aristas se presentan análisis sobre el violentísimo hecho que involucró a 11 jóvenes de entre 18 y 20 años (todos detenidos), que derivó en el final abrupto de la vida de Fernando, tras recibir golpes de todo tipo, incluso una patada en su cabeza cuando estaba caído e indefenso, y que le provocó la muerte, según la autopsia.
La Unión Argentina de Rugby se pronunció públicamente ayer a través de un comunicado también recibió repudios, sobre todo en las redes sociales, debido a que no planteaba con exactitud el hecho violento que derivó en la muerte de una persona.
Esteban Fainberg, presidente de la Unión Santafesina de Rugby, dijo en el programa televisivo Apto para Todo Público que “en primer lugar, lo peor que podríamos hacer es hablar de esto como un simple accidente”.
El dirigente señaló que “no conocemos a los chicos involucrados, no se puede saber qué grado de violencia tienen habitualmente en su forma de manejarse”.
Detalló que “no hay dudas de que el cuerpo de un jugador de rugby adolescente o adulto se transforma en un arma peligrosa y puede terminar mal”.
Consultado acerca de la existencia de líderes negativos y cómo se forman a los jugadores ante estos escenarios, Fainberg dijo que “están en todas las divisiones y tienen su principal influencia desde los 14 a los 17 años, y después se dan cuenta de que de esa forma no se va a ningún lado”.
En este sentido, especificó que “el ejemplo que les damos es el del capitán, que es el primero en llegar, el último en irse, en contener a sus compañeros, transmitir las órdenes y esa figura es la que se incentiva, el líder negativo es el que utiliza los mismos conceptos, pero mal aplicados”.
En cuanto, esa formación Fainberg insistió: “Se trabaja especialmente sobre los chicos que tienen complicaciones con el tema violencia, suelen ser chicos que reaccionan en situaciones de contexto físico, malinterpretan al jugador rival y se los termina sancionando internamente y hasta en ocasiones no se les permite jugar”.
El dirigente hizo hincapié en que “se habla con los padres, participan muchísimo en todas las divisiones, pero estos problemas atacan al segmento juvenil”.
Consultado acerca de si el rugby forma sujetos violentos, Fainberg concluyó: “No, para nada, justamente las armas que utilizamos para formar nuestros jugadores son el autocontrol y una frase que ya quedó vieja: ser caballero, alguien que pude aceptar un golpe y luego pararse y darle la mano al rival, después de que termina el partido vos vas a compartir con tu rival un tercer tiempo que lo que hace es unir más a los jugadores”.
En cuanto a la forma de comunicar el mensaje y el repudio que recibió la entidad que aglutina a todos los actores del rugby en el país, el presidente de la Unión Santafesina sostuvo que “el mensaje fue hecho por gente que no está en los medios habitualmente y que además debe traducir la cautela del dirigente, entonces a veces se hace difícil utilizar las palabras, pero estos chicos cometieron un delito, es casi imposible que la UAR diga ‘estos delincuentes’ ¿se entiende?”.
Argumentó que “la UAR a veces es conservadora a la hora de lamentar el suceso, por ejemplo yo hoy tuve un exabrupto, utilicé una mala palabra para calificar una situación entonces a veces uno se da cuenta de que tiene que controlar las cosas que y cómo se dicen, y en los comunicados institucionales no se puede utilizar ese léxico”.
Para finalizar sostuvo que “tenemos una orden directa del presidente de la UAR para que aparezcamos en los medios y expliquemos de qué se trata la disciplina, como se maneja el rugby habitualmente, cuáles son las enseñanzas y que la gente se quede tranquila de que trabajamos para que esto no vuelva a suceder y si vuelve a suceder volveremos a actuar y redoblaremos esfuerzos para que no pase”.