Durante septiembre se registraron 12 procesos, lo que eleva la cifra anual a 75 donaciones.
El Ministerio de Salud de la provincia, a través del Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos y tejidos (Cudaio), informó que durante el mes de septiembre, se registraron 12 procesos de donación en Santa Fe. Los mismos se produjeron en los hospitales Clemente Álvarez, Provincial del Centenario e Italiano, y los sanatorios Los Alerces, Parque, Americano y Rosendo García, todos de Rosario; en los hospitales José María Cullen de Santa Fe; Eva Perón de Granadero Baigorria; y Jaime Ferré de Rafaela.
Con esta cifra, Santa Fe eleva a 75 las donaciones efectuadas desde el comienzo del año, muy cerca de la marca histórica de 77 alcanzada en 2017 y 2018.
Los órganos ablacionados en estos procesos permitieron 24 trasplantes: 18 de riñón, cuatro de hígado y dos de corazón, que se destinaron a pacientes de la lista de espera de Incucai, en distintas partes del país. Además, hubo cinco donantes de córneas.
A nivel nacional, los donantes fueron 69 en septiembre y 667 desde el 1 de enero a la fecha. En lo que va del año, se realizaron 1432 trasplantes mientras que la lista de espera para órganos es de 7214 personas en todo el país y de 559 en Santa Fe.
Trabajo sostenido
El director de Cudaio, Martín Cuestas, expresó que “nos enorgullece esta consolidación de un trabajo que abarca a muchas instituciones y personas que son claves para salvar cientos de vidas y mejorar otras tantas”.
“Queda claro que no hay rachas ni meses excepcionales, que se trata de un trabajo sostenido de muchos años con las políticas del Ministerio de Salud a la cabeza, más un compromiso creciente y muy profesional de quienes conducen hospitales y sanatorios donantes y sus terapias intensivas, la guardia permanente y dedicada de la coordinación operativa y el laboratorio del Cudaio, la tarea paciente de nuestra área de capacitación, y la colaboración logística de agentes de tránsito, guardias urbanas y policía”, continuó.
Cuestas mencionó que “nuestra sociedad ha madurado una actitud donante pero para que eso se traduzca en más ablaciones y más trasplantes es indispensable que se fusionen todos los eslabones de una cadena de alta complejidad”. En ese sentido, enumeró la necesidad de que “cada efector tenga un protocolo de detección y aviso de potenciales donantes así como también, personal e infraestructura preparados para el proceso de donación; que la coordinación operativa, el sistema de traslados y el laboratorio de Cudaio estén preparados para cubrir la demanda en todo el territorio provincial; y que los aeropuertos, la movilidad complementaria y los agentes de apoyo estén también a la altura para complementar los procesos”, concluyó.