El dirigente del PJ también sostuvo que, tras el 10 de diciembre, “queda un camino de reconstrucción que tampoco va a ser rápido” a la luz del eventual triunfo de Alberto Fernández. Analizó la reacción del gobierno nacional y los cambios que se avecinan en la provincia.

“Es un resultado muy difícil de revertir para el gobierno porque la diferencia es amplia y porque el gobierno no registró lo mal que la población la ha venido pasando”. De esa forma, Alejandro Rossi se pronunció acerca del eventual triunfo de Alberto Fernández el próximo 27 de octubre. En diálogo con Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario), el dirigente justicialista evaluó dificultoso que la gestión de Mauricio Macri pueda revertir el resultado de las PASO del 11 de agosto.

Desde su óptica, “hubo un pecado inicial de la concepción con la cual el gobierno asumió y no lo corrigió oportunamente. Arrancó con que el solo hecho de que se trataba de un gobierno más liberal, iban a llover las inversiones y recibió permanentes señales de que se eso no sucedería. En vez de corregir, profundizó el camino”, indicó y objetó la libre circulación de capitales que se mantuvo por más de tres años.

En tal sentido y acerca del duro golpe que el gobierno recibió en las urnas, Rossi insistió en el proceso determinado por el malestar de la población. A ese panorama, se añade el plazo que media entre el 27 de octubre y el 10 de diciembre. “Queda una transición que va a ser más inestable y después queda un camino de reconstrucción que tampoco va a ser rápido. Alberto Fernández, con su postura política contribuye a la tranquilidad de la Nación, sin dejar de ser un candidato de la oposición –ponderó–. Es alguien que está viendo un gobierno de dificultades”.

Paralelamente, el exprecandidato a intendente se expresó con relación a la transición que ya está en marcha en la provincia. “Todos sabemos que la provincia no tiene un nivel de endeudamiento a largo plazo importante. Se visualizaba una provincia que iba a demandar correcciones en el primer semestre del año que viene. El ritmo de deterioro de la economía nacional y la caída de la recaudación plantean un escenario cada vez más gravoso”, opinó.

Sobre si la eventual gestión de Alberto Fernández salde la deuda, ya histórica, que la Nación mantiene con Santa Fe, Rossi analizó: “Todo eso está sujeto a cómo la economía reaccione. Es encontrar el piso, el rebote y un nivel de actividad que permita generar el financiamiento adicional necesario para cumplir las obligaciones internacionales y las nacionales”. Al respecto, añadió: “No va a suceder por shock. Va a ser un año, el que viene, de correcciones importantes. Seguramente, se privilegiará la actividad económica interna, habrá alguna recompensación del sistema de jubilaciones y una serie de medidas que apunten a que el mercado interno reaccione”, vaticinó.

Consultado sobre la reforma de la Constitución provincial –cuyo proyecto fue rechazado en la Legislatura–, Rossi opinó que “hay que sincerar el discurso”. “O la reforma se hace excluyendo al gobernador de la reelección en el primer caso o la reforma se hace, entre otras cosas, para habilitar la reelección del gobernador en ejercicio”, adujo.

Por otra parte y habida cuenta del contexto de crisis, la situación del transporte sigue siendo motivo de discusión. En efecto, las tarifas fueron congeladas por el intendente José Corral. El dirigente justicialista y empresario indicó que la medida fue un error. “Por las características del sistema, todos los insumos están dolarizados. El transporte es un hecho de la economía, no es un hecho de la política. Es una ecuación económica que tiene que financiarse y dar un resultado positivo o cero”, enfatizó.

Finalmente, reflexionó: “No veo a nadie con un lanzallamas y el bidón de nafta”, en alusión a presuntos intentos de desestabilización del gobierno nacional y los procesos de transición tanto a nivel municipal, como provincial y nacional. “Cada vez que el peronismo asumió después del colapso del gobierno anterior, el costo fue fenomenal para el propio gobierno que asumía”, definió.

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