Lo expresó Danilo Capitani a la luz de los resultados de las PASO nacionales. El senador provincial destacó la unidad del PJ en Santa Fe como “modelo en todo el país” y se refirió a la transición entre Lifschitz y Perotti.
“Haber ganado por tanta diferencia hace que la gente tenga en su cabeza que el nuevo presidente es Alberto Fernández. El haber votado para que se vaya (Mauricio) Macri por no aguantar más el tema económico fue fundamental”. De esa manera, Danilo Capitani, senador por el departamento San Jerónimo, analizó los resultados de las PASO. En diálogo con Ciudadanos (que se emite este domingo, a las 20, por Somos Santa Fe, Somos Rafaela y Somos Rosario), el dirigente justicialista aclaró que Fernández es candidato. “Todavía no maneja ningún resorte de nada. Las decisiones que se tomen de acá al 10 de diciembre las tomará el presidente Macri”.
Frente al 27 de octubre, el legislador provincial consideró que si bien el triunfo del Frente de Todos fue abrumador el panorama pone a Alberto Fernández “de cara a la sociedad como una persona que tiene que resolver problemas cuando todavía no se hizo cargo”. En tal sentido, bregó por una transición ordenada, sin alteraciones ni temores para la ciudadanía que puedan provocar mayores problemas económicos.
Capitani abonó la lectura que refiere al voto castigo que se debe “al cansancio de una política económica que permanentemente agobia a la clase media que fue la que hace cuatro años le dio el triunfo y que, hace dos años, le daba nuevamente el triunfo en la (elección) intermedia”. Asimismo, atribuyó la victoria a que “la suma del Frente de Todos fue perfecta” en la conjugación del núcleo duro de Cristina Kirchner, los votos que el propio Alberto Fernández supo cosechar en sectores independientes y el aporte del Frente Renovador más otras fuerzas.
Al mismo tiempo, el senador destacó la unidad que el justicialismo logró en nuestra provincia como símbolo de lo que luego se observó en el plano nacional. “Se tomó como el modelo a seguir en todo el país. Fue muy bueno. Se replicó en la mayoría de las provincias”, enfatizó.
En cuanto a la transición en Santa Fe entre la gestión de Miguel Lifschitz y la que emprenderá Omar Perotti, Capitani indicó que del endeudamiento que tomó la provincia “ya no queda nada”, a lo cual se le agrega “el tema de las obras empezadas sobre las que disminuyeron las tareas y aumentaron los tiempos de terminación; y es un gran problema porque será un déficit que tendrá la administración de Perotti”, advirtió. Y definió: “Al déficit santafesino se le agrega la cuestión nacional que por meses va a ser compleja. Será difícil revertir rápidamente la situación”.
Consultado sobre si formará parte del gabinete del gobernador electo, el dirigente expresó que de haber una convocatoria “y como justicialista, es un deber como militante; sería para mí un honor participar después de 12 años de gobierno del Frente Progresista”. En ese orden, planteó que María Eugenia Bielsa debería ser una de las primeras figuras que integre el grupo de trabajo de quien será el nuevo jefe de la Casa Gris a partir del 10 de diciembre.