Lo advirtió Martín Serafini, gerente de compras de Fisa Metal. La empresa, creada en 1986, logró consolidarse en la región con 89 empleados y contar con una flota de camiones propia para la distribución. Cuestionó la alta presión tributaria.
Martín Serafini, gerente de compras de Fisa Metal, evaluó la situación que atraviesa el sector y la calificó de complicada. “Venimos de años bastante difíciles. Nos basamos en datos estadísticos. Se planifica tres meses hacia delante lo que respecta a compras de materiales, pero hay cambios radicales de mes a mes. Hay meses en los que se trabaja bien, otros en los que se frena y se hace complicado poder pensar a futuro”, planteó en diálogo con ABC1 (que se emite este domingo a las 23 por Somos Santa Fe y Somos Rafaela y a las 21 por Somos Rosario).
La empresa, que cuenta con un plantel de 89 empleados, afronta “una alta presión impositiva, hay mucha variedad en la provincia entre lo que algunas empresas pueden tributar y otras no”. “Según cómo puede encuadrar la actividad en la que se desarrolla, puede tener algunos privilegios o algunas exenciones que no todos las tenemos”, precisó el empresario.
Fisa Metal ya transita la segunda generación desde que se constituyó en 1986. “Los viejos arrancaron con algo familiar. Eran todos empleados de una empresa similar que cerró. Decidieron juntarse, arrancar de a poquito en base a mucho esfuerzo y sacrificio. Hemos podido crecer y hemos conseguido agrandar los depósitos y generar nuestra propia flota de camiones para la distribución”, señaló y remarcó que se llevan adelante la logística puerta a puerta.
Frente al actual panorama económico, Serafini sostuvo: “Hoy estamos frente a un parate interesante, es una baja grande. Estamos en una situación muy similar a la de 2001”, lamentó.