Participaron cerca de 400 personas y se recaudaron cuatro millones de pesos.
El gobierno provincial, a través del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, realizó este jueves la segunda subasta de bienes decomisados a bandas delictivas. Se trata de elementos que fueron incautados por la Justicia en el marco de investigaciones penales y posteriormente derivados a los depósitos de la Agencia de Bienes Decomisados (Aprad) en Santo Tomé y Alvear, con el objeto de garantizar su conservación en buen estado.
Cerca de 400 personas participaron de la subasta de 21 rodados en la cual se recaudó una cifra cercana a los cuatro millones de pesos.
Durante el acto, llevado a cabo en La Esquina Encendida (Estanislao Zeballos y Facundo Zuviría) de la ciudad de Santa Fe, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Ricardo Silberstein, sostuvo que “este es un hecho más, en el marco de las distintas políticas que se vienen realizando en la provincia” pero consignó que este tipo de remates “no es casual”.
“Hace cuatro años se presentó en la provincia un sistema de procedimientos penales diferente al del resto del país, el cual hace posible que nosotros podamos rematar los bienes. Ese sistema, entre 2014 y 2018 ha reducido en un 21% los homicidios dolosos, un 60% los homicidios en ocasión de robo y un 40% las entraderas en la provincia”, afirmo Silberstein, y destacó que en la provincia “hemos incrementado un 20% los allanamientos y un 34% la tasa de encarcelamiento”.
“Si a eso se le suma la creación de esta agencia, verán la decisión inquebrantable de este gobierno de perseguir al delito. No hay nada más justo que rematar los bienes que se han utilizado para cometer delitos; no hay nada mejor que esos bienes sean adquiridos por personas de bien, con fondos provenientes de sus trabajos; y no hay nada mejor que lo que ustedes paguen sea destinado a los más vulnerables. Estas son políticas de Estado”, concluyó.
Por su parte el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, manifestó que se trata de “una importante actividad institucional que se realiza en el marco de una política pública que lleva adelante el gobierno de la provincia de Santa Fe, acompañada por la Cámara de Diputados y Senadores, entendiendo como transcendental que no alcanza solamente con detener a los delincuentes sino que es fundamental que vayamos por los flujos económicos que tienen estas organizaciones criminales”.
“Somos la única provincia de Argentina que tiene una Ley de Extinción de Dominio”, destacó, y añadió que “una vez que los delincuentes son detenidos, los bienes que utilizaron para cometer esos delitos son incautados y rematados por el Estado provincial. Ese dinero que queda de los remates va para instituciones benéficas y para resarcir a las víctimas de esos delitos”.
Segunda subasta
El secretario de Gestión Pública, Matías Figueroa Escauriza, indicó que «esta es la segunda subasta que realizamos en la provincia y la primera en la ciudad capital. Hicimos un trámite ante el Registro de la Propiedad Automotor para que cada vehículo por el que se pueda ofertar se da de baja y se bloquea el dominio con anterioridad”.
Así, «se le va a dar una nueva chapa patente para no tener ninguna vinculación con las organizaciones criminales».
«Para nosotros, como gobierno provincial, es una satisfacción enorme vender estos vehículos, porque lo que fuimos recaudando se pudo destinar a las víctimas. Con la subasta del mes de octubre dimos 1.800.000 pesos a abuelos y abuelas que habían sido víctimas de secuestros virtuales y compramos muchos insumos para escuelas públicas, hospitales, clubes de barrios e instituciones», concluyó Figueroa Escauriza.
Participaron también de la actividad, el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia de Santa Fe, Antonio Bonfatti; y el diputado provincial Rubén Galassi; entre otras autoridades.