Diferentes organizaciones vinculadas a la lucha por el uso de esta sustancia de forma medicinal están realizando la convocatoria. “Las mamás que cultivamos las plantas nos sentimos dejadas por el Estado, pero también sentimos que somos perseguidas por la ley, porque no nos permite cultivar”, dicen.
El próximo miércoles 27, a las 10, se dará comienzo a una Jornada por el acceso al cannabis. Será en las puertas del Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF), en French 4950.
El objetivo es visibilizar la falta de respuesta a la solicitud de importación de flores de cannabis que realizó la institución a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
La solicitud es para la investigación y elaboración de medicamentos, tal como lo prevé tanto la Ley Nacional 27350 como la Ley Provincial 9524/84.
El encuentro está organizado por la Red Cannábica Santafesina, espacio colectivo que aúna diferentes organizaciones cannábicas de la provincia.
Fabiana Roa y Laura Acosta, integran algunas de estas organizaciones. “Esa gestión fue hecha en base a la ley provincial, que es modelo en el país”, dijo en Apto para Todo Público Roa, de la Asociación para Usuarios del Cannabis Medicinal (Apucam).
“La primera respuesta fue completar una serie de documentaciones, lo que se hizo. El directorio del LIF mantuvo reuniones con los representantes de Anmat, pero después de eso, no hubo respuesta”, sostuvo Roa.
“Todo nace de la voluntad de Uruguay de donar 50 kg de la materia prima esencial al estado provincial para la fabricación del aceite de cannabis, nosotras nos sentimos movilizadas, se formó la red cannábica santafesina donde estamos nucleadas todas las organizaciones de la provincia”, destacó Roa.
El abrazo simbólico al LIF se llevará a cabo “junto a los directores de la institución para que los representantes del gobierno nacional tomen conciencia de que para nosotros es una gran necesidad”.
El objetivo de las madres también es avanzar en todos los estudios de las diferentes enfermedades y que la iniciativa no se quede solo en las epilepsias refractarias.
“Antes de la ley y de la lucha, algunas mamás venimos en esto, no podíamos esperar más sabiendo que hay una alternativa para calmarle el dolor a tu hijo no esperás”, dijo Laura Acosta de Macame.
“Las mamás que cultivamos las plantas nos sentimos dejadas por el Estado, pero también sentimos que somos perseguidas por la ley, porque no nos permite cultivar”, sostuvo Acosta.
“Queremos que el laboratorio tenga su experiencia y que a quienes venimos cultivando no nos persigan”, pidió.
Consultada acerca de si alguna madre tuvo episodios de allanamientos por cultivar cannabis, Acosta indicó que «en Santa Fe no, pero en el país si. Además, de sufrir robos y en esos casos hay que llamar a la policía”.
“El aceite de cannabis nos cambió la vida, la esperanza, la expectativa, día a día uno comienza a abrazarse más fuerte a esta lucha, nos vamos comprometiendo para establecer vínculos de solidaridad, cada vez hay más gente que lo precisa, se hizo una ola inmensa”, finalizó.