Desde febrero de 2018, se estableció en Santa Fe la gratuidad de la energía eléctrica para las personas conectadas a un equipamiento médico.
Gracias al trabajo conjunto del Ministerio de Salud de Santa Fe y la Empresa Provincial de la Energía (EPE), ya son 500 los electrodependientes beneficiados con la gratuidad del servicio eléctrico.
Cabe mencionar que la provincia de Santa Fe cuenta desde febrero de 2018 con el Decreto Nº 0064, firmado por el gobernador Miguel Lifschitz, que establece la gratuidad del servicio de energía eléctrica a todas las personas que, por su condición de salud, necesitan estar conectadas permanentemente a un equipamiento médico.
El trabajo realizado por la EPE y el Ministerio consistió en localizar a las familias, a través de un registro previo con el que contaba la empresa, de personas subsidiadas por su condición de electrodependencia. Además, a estos usuarios se les comunicó que por Ley nacional debían cumplimentar el trámite para ser reconocidos como pacientes electrodependientes. De los 500 beneficiados, 435 comenzaron el trámite correspondiente ante la Nación. De ese total, 250 ya están aprobados mientras que resto se encuentra en proceso y se espera que para marzo de 2019 puedan concretarse.
Además se avanza, como lo establece la Ley, sobre un protocolo para garantizar la continuidad del suministro eléctrico en el caso de corte de energía.
Al respecto, la ministra de Salud, Andrea Uboldi, expresó que “para nosotros es un orgullo y una tranquilidad saber que Santa Fe sigue priorizando la salud y el cuidado en este contexto de recortes a nivel nacional. Trabajamos mucho junto a distintos actores involucrados, pero fundamentalmente con las familias que atraviesan estas situaciones».
«Estos grandes avances que vamos logrando son fundamentales para la garantía de derechos, más aún cuando se trata de casos tan complejos en los que las familias atraviesan por momentos de muchas complicaciones».
Los beneficiados
El jefe de Control de Pérdidas de la EPE, Cristian Berrino, aseguró que «son 500 los santafesinos que, a partir del decreto provincial, ya son beneficiarias de la gratuidad y nosotros como empresa proveedora ya estamos en el circuito de subsidios por esta causa, por lo que en el transcurso de este año la Nación no nos facturó esa energía”.
“Todavía hay una cantidad importante que no se ha acercado, puede haber familias que nosotros desconocemos que están en esta situación. Es importante informarles que pueden completar el formulario y elevarlo directamente al Ministerio de Salud de la Nación o utilizarnos a nosotros como canal de comunicación”, concluyó Berrino.
Asistencia de la provincia
El senado provincial aprobó la Ley de Electrodependientes, autoría de las diputadas Claudia Giaccone y Cesira Arcando y del senador por el departamento Rosario, Miguel Capiello. La norma adhiere a la Ley nacional N° 27.351 reglamentada en 2017 que permite a los pacientes en esta condición contar con un certificado nacional que garantice el beneficio a lo largo del tiempo.
Luz Torres, directora provincial de Información para la Gestión del Ministerio de Salud de la provincia, indicó que el objetivo “es facilitar el trámite de reconocimiento de las personas electrodependientes en el registro nacional, ya que a partir de ahí se puede obtener la tarifa gratuita en la provincia. Para eso se necesita la aprobación de la Secretaría de Energía de la Nación y del Ministerio de Salud nacional. Es un trámite similar al certificado único de discapacidad”.
Protocolo
Uno de los artículos de la Ley nacional asegura al paciente electrodependiente la continuidad del suministro eléctrico en caso de cortes de luz.
Para ello, en Santa Fe se trabaja en una instancia superadora respecto de otras provincias: se trata de incorporar un protocolo de acción que garantice la corriente en caso de un corte, de la forma más eficiente y segura para cada caso.
“Estamos planteando un protocolo de intervención con la participación de tres actores: el Ministerio de Salud, Protección Civil y la distribuidora de energía”, sostuvo Berrino.
“No siempre llevar un grupo electrógeno es la mejor solución en todos los casos, por lo complejo de su manipulación. Por eso, con la intervención de otros actores, es posible encontrar soluciones más ágiles y efectivas para cada caso particular”.
“A partir de la promulgación, tenemos 90 días para reglamentarla. Por lo tanto, entre tres áreas vamos a trabajar para establecer ese protocolo que nos permita brindar una solución rápida, que en algunos casos será un grupo electrógeno, pero también estamos evaluando otras fuentes alternativas como UPS con baterías”, finalizó.
