Así lo dijo José Luis Ambrosino, representante de Los Sin Techo, en Santa Fe. Sostuvo que ese estadio en Santa Fe tiene solución y le pidió a los políticos que “no divaguen”.
Todavía retumban en todos los organismos del Estado nacional las urgentes estadísticas de Unicef que señalan al 48% de lo niños argentinos que están viviendo en la pobreza. Según ese informe, 6,5 millones de niños padecen problemas de educación, hábitat, agua potable, salud, protección social, vivienda adecuada y saneamiento.
En la ciudad de Santa Fe, 1700 familias viven en ranchos de chapa o de cartón, no comen todos los días y están expuestas a las vulnerabilidades que les ofrecen esas circunstancias.
La conclusión pertenece a José Luis Ambrosino, referente del Movimiento Los Sin Techo, que lleva en Santa Fe 31 años trabajando con las franjas sociales más castigas.
El dirigente explicó por el programa Apto Para Todo Público, que “lejos de ser algo desesperanzador, es un problema solucionable”. Ambrosino detalló que “Con 10 o 15 millones de pesos, se saca a todas esas familias de la indigencia, hoy están habitando esas tumbas de chapa” donde pasan frío en invierno, calor en verano y miedo todo el año.
Desde Los Sin Techo también se reiteró una consigna que se escucha año a año y tiene que ver con la urgencia de la pobreza: “A una persona con hambre no le venga a explicar lo importante que es la democracia”.
Más crudo resultó el testimonio del refeerente cuando explicó que las familias indigentes santafesinas necesitan poco menos de 10.000 pesos solo para poder costear sus alimentos. Sin embargo, solo pueden llegar a tener por mes entre $3500 y $4000. Ante la consulta de qué hacen para llegar al resto necesario, la respuesta fue contundente: “La joven con buena presencia y audacia se prostituye, el joven con lo mismo vende droga, el tercer camino al que lleva la desesperanza es la usura que se paga por día, con la retención de la Tarjeta Única de Cuidadanía y el DNI, y por último el robo”.
Ambrosino también reconoció la lucha feminista para reivindicar los derechos de las mujeres “porque la mujer pobre tiene un enorme protagonismo en los barrios, por eso le pido a estos movimientos que no se olvide de las mujeres pobres”.